La campaña de Call of Duty: Modern Warfare 3 es nefasta, pero decir que los jugadores compran Call of Duty por su historia, solamente, es como afirmar que la gente ve contenido para adultos por la trama (algunos sí). Así las cosas, tiene sentido que Activision divida, desde el año pasado, las reseñas de ambos, modo individual y multijugador y, al menos en el caso de Modern Warfare 3 es un acierto, pues la experiencia que ambos ofrecen no podría ser más diferente. Pero ¿puede un solo componente del paquete compensar por los pecados del otro?
Como con su frente individual, cuyo desarrollo fue un desastre, con el multijugador, Infinity Ward y Sledgehammer Games buscaron también la ruta más corta hacia el objetivo y encontraron la respuesta a sus plegarias en un recurso igual de barato que los niveles abiertos de la historia, pero mucho más efectivo: el reciclaje de mapas.
Siguiendo la tendencia actual, el multiplayer de Modern Warfare 3 podría renombrarse Call of Duty: Modern Warfare 2 Remake o, en su defecto, Modern Warfare Greatest Hits, y nadie protestaría, pues, si bien sustanciosa, su selección de mapas está compuesta por un desfile de niveles clásicos cuyo carácter legendario los convierte en una apuesta segura, pero cero innovadora.
Un juego brutalmente responsivo y ágil
Hablo de 16 mapas, entre los cuales figuran los míticos Terminal, Wasteland, Skidrow, Scrapyard, Quarry y Favela -hasta Rust hace su enésima aparición en el menú-. No hay un sólo escenario en la selección de vainilla que pueda catalogar como inédito, pero decir que el repertorio es pobre o, más importante aún, que no me divertí, sería mentir. Con el modo historia, mi conteo de horas en Modern Warfare 3 ascendía, apenas, a unas cinco. En un parpadeo llevaba más de 40 horas en el multijugador y Modern Warfare Zombies.
Todos estos escenarios son históricos por una razón, y bastó con dejarlos prácticamente intactos para satisfacer mi apetito de calidad por un lado, y de nostalgia por el otro. Añade a eso un arsenal enorme, la importación de armas y operadores del año pasado, así como la función de votar por tus mapas favoritos y tienes, en automático, un multiplayer más completo que muchos del pasado.
Da coraje porque sé muy bien lo que Activision trata de hacer con esta plantilla masticada de niveles, pero la verdad es que la pasé muy bien, y es que además, algunos como Sub Base se beneficiaron del nado -algo que no existía en 2009-, lo que me lleva al tema de las mecánicas, otro acierto casi instantáneo para este modo multijugador.
Favela trae muchas memorias de regreso
Puede parecer irrelevante decir que Modern Warfare 3 goza de excelente controles, pero no hay que olvidar que Black Ops Cold War fue capaz de echar a perder lo que Infinity Ward ya había establecido con Modern Warfare (2019). Al transitar entre ambos juegos, el descarte de sistemas como la apertura de puertas o el uso contextual de superficies como apoyo para las armas fue como un balde de agua helada.
Acá no. Los desarrolladores optaron por respetar lo que no estaba roto y el multiplayer de Modern Warfare 3 se siente como mantequilla entre las manos. De hecho, los tiempos de respuesta me parecieron incluso más ágiles de lo que los recordaba el año pasado, y no dejo de maravillarme ante el netcode de un juego que no sufre, incluso con conexiones de ping relativamente alto.
En su modo competitivo, Modern Warfare 3 es un juego brutalmente responsivo y ágil, reuniendo en un solo paquete, todos los recursos de movilidad que a la fórmula le han funcionado a lo largo de las décadas. Desde los más antiguos, como la barrida y el salto del delfín, hasta los más nuevos, como la interrupción de los derrapes y colgarse de los bordes, ninguno de los cuales suelo usar, pero que están presentes para explotar si tienes el talento o te gusta jugar de cierta manera.
Un paso adelante, otro atrás
Irónicamente, lo único que Sledgehammer Games e Infinity Ward quisieron añadir fue lo que más inútil encontré: la postura táctica. Apuntar y oprimir el D-pad abajo, simultáneamente, hace que tu personaje deje de apuntar con la mirilla y, en su lugar, incline el arma hacia un costado, como si se preparara para un tiroteo entre pandilleros de Los Ángeles. Bastó con tratar de disparar así por algunas partidas seguidas, como parte de un objetivo, para confirmar lo que ya había escuchado de expertos en combate antes: esto es ridículo y no sirve de nada.
La postura táctica me pareció, francamente, inútil
Pero hablemos de los objetivos, que, para mi gusto, son la novedad más interesante en este paquete multijugador. Pronunciar la palabra "objetivos" en un juego como Call of Duty: Modern Warfare no te dice mucho, pero es su implementación en la estructura de MW3 la que los convierte en algo diferente.
Verás, la progresión en este juego se acopla, casi por completo, a la fórmula que ya conoces: juegas, acumulas puntos, vas escalando niveles y, conforme lo haces, desbloqueas armas, perks, mejoras de campo, etcétera; mientras que tus armas adquieren nuevos accesorios o adornos.
Muchos ítems que antes se desbloqueaban de manera orgánica, ahora están al alcance cumpliendo objetivos, lo cual puede ser ventajoso y tedioso a la vez
Eso permanece, sólo que ahora hay dos tipos de elementos desbloqueables, aquellos que se alinean con lo que acabo de decir y aquellos que se desbloquean cumpliendo tareas. Así por ejemplo, la racha de bajas de Avión Artillado o el perk de invisibilidad a UAV, ya no son accesibles por la vía de la mera acumulación de experiencia, sino que requieren que cumplas con los objetivos diarios, los cuales se reciclan cada cierto número de horas. Tú eliges cuáles de estas ventajas o armas desbloquear y en qué momento, lo que permite acelerar el acopio de artefactos que, de otra manera, quizás estarían reservados para mucho más adelante en la progresión lineal de tu personaje.
Parece simple, pero este cambio puede alterar profundamente tu manera de jugar, lo cual es un arma de doble filo porque tiene el potencial de convertirte en un jugador egoísta, enfocado en cumplir tus propias asignaturas, en vez de concentrarte en la meta colectiva de la partida en curso. Y también puede ser frustrante si te topas con objetivos que no dependan de ti o resultan contradictorios. Un paso adelante, otro atrás.
A propósito de ventajas, también es importante mencionar que Modern Warfare 3 adopta una aproximación un poquito distinta a este aspecto tan tradicional del multijugador. Ahora los perks están agrupados en categorías: guantes, botas y equipamiento. Los guantes alojan aquellas cualidades que, en el mundo real, tendrían que ver con las manos, como Carroñero, con la cual levantas munición de jugadores muertos, o Amped que permite alternar entre armas más rápido.
Las botas, como es lógico, albergan ventajas como la de moverte más rápido o más sigilosamente. Y en el equipamiento está todo aquello que no encaja con lo anterior. Flak Jacket, que es el chaleco anti-explosivos, acá son las Hombreras Antibombas, y Sleight of Hand para recargar más rápido, acá viene en la forma de una funda de cargador; unos audífonos especiales ahora incorporan la mejora Hardliner para adelantar las rachas de bajas, una linterna ultravioleta muestra los pasos del enemigo, etcétera. Este es, más bien, un cambio en la forma, no en el fondo de lo que los perks siempre han sido.
Dicho eso, sí existen en Modern Warfare 3, algunas novedades de fondo, especialmente en el ámbito de los modos, donde algo de lo que más llamó mi atención fue el formato Masacre o Cutthroat. Fue grato reencontrarse, también, con el modo Guerra de WWII, que a su vez es una copia del formato de juego base de Overwatch, pero otra vez, nada nuevo bajo el sol, en realidad.
Se pueden decir muchas cosas del multijugador, pero no que sea feo de ver o que se escuche mal
De lo poco verdaderamente bueno y nuevo en Call of Duty: Modern Warfare 3, Cutthroat enfrenta a tres equipos de tres miembros, en rondas, por el control de una bandera en el mapa o por eliminarse mutuamente -lo primero que ocurra-. Como Gunfight en 2019, Masacre no reinventa la rueda, pero en su simpleza, resulta súper dinámico y divertido. Virtudes que siguen faltando a Guerra Terrestre, una imitación desordenada de Battlefield que Modern Warfare (2019) introdujo, y a la cual sólo le faltan los barandales de clase para, verdaderamente, amenazar a Electronic Arts, pero que Activision ha mantenido caótica durante años.
Zombies en Modern Warfare 3
El multiplayer de Modern Warfare 3 es la definición misma de reciclaje
El modo que más cambió en su esencia este año fue Zombies, mismo que jamás había existido en Modern Warfare. Como el resto de lo que MW3 es, Modern Warfare Zombies adopta el reciclaje como filosofía, y como en el resto del paquete competitivo, aquí también funciona o, cuando menos, funciona mejor que en Call of Duty: Vanguard, cuyo carácter pequeño y repetitivo, lo hizo súper decepcionante.
Para que el modo zombie funcionara sin mucho esfuerzo, Sledgehammer Games tomó DMZ, le dio una barnizada de no-muertos y listo, lo convirtió en Modern Warfare Zombies. DMZ, por si no lo conoces, es una modalidad por extracción, donde, a diferencia de Warzone, la meta no es ser el último superviviente, sino cumplir misiones, combatir NPCs y lograr escapar del mapa con el botín, y todo con una pizca de historia.
No voy a mentir, junto con Invasión, para mí este es el modo más monótono -como lo es también en otras de sus presentaciones-, pero es un tema de gustos, y definitivamente lo encontré más tolerable que las rendiciones por rondas, donde el nivel de extravagancia y enigma los hacía demasiado exóticos, muy desconectados del resto del paquete semi-realista que COD siempre ha sido.
Puedes mejorar, progresar y extraer las armas que encuentres en Modern Warfare Zombies
Antes de continuar y, a propósito de elementos exóticos, hago escala rápida en el tema de los skins de fantasía que no estaban cuando dejé de jugar Modern Warfare 2, y ahora han infestado el juego. Entiendo por qué están ahí (dinero), pero en serio, arruinan la inmersión. De qué sirve toda la cinemática de despliegue en un mapa, la gallardía, el tono auténtico y demás, si combates codo a codo con Lilith de Diablo 4 y Spawn… te saca por completo de la experiencia, pero bueno… es un juego, al final del día.
¿En qué estábamos? ¡Ah, sí! Modern Warfare Zombies no se libera de la pesadez por completo, y está estructurado de manera tal, que tendrás que cumplir decenas y decenas, y decenas de retos, antes de poder progresar en su historia, una tarea que, sin amigos con quienes coordinarse, será muy difícil de cumplir, y a la larga se vuelve tediosa. Vaya, este es un plato de segunda mesa, la verdad.
¿Vale la pena el multijugador de Modern Warfare 3?
El multiplayer de Modern Warfare 3 es la definición misma de reciclaje. ¿Funciona? Sí, porque son mapas y fórmulas probadas que, encima, redondean una modalidad que, a diferencia de otros años, llega completa, pero que no basta para compensar por el patético esfuerzo que este juego ha sido. Hay muy poco de nuevo en este modo competitivo y considerando que la campaña apesta rotundamente, y no puedes comprar estos elementos por separado, no vemos un motivo real para recomendar Call of Duty este año. Esta es una de las instancias donde, efectivamente, será mucho mejor cuando, gracias a la compra de Microsoft, Modern Warfare 3 llegue a Game Pass en un año o dos.
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