Los desarrolladores de videojuegos sufren explotación laboral, eso no es ningún secreto y, para colmo, han sufrido una de las peores oleadas de despidos en décadas. Quizás con eso en mente, Mike Ybarra, ex-presidente de Blizzard, propuso, hace algunos días vía X, que se pudiera dar propinas a los creadores al terminar un juego. La respuesta fue precisamente la que él esperaba: furia.
"Cuando termino un juego, algunos simplemente me dejan asombrado de lo increíble que fue la experiencia. Al final del juego, a menudo he pensado 'Desearía poder darles a estos tipos otros $10 o $20 porque valió más que mis $70 iniciales y no intentaron sacarme dinero en cada segundo'".
Ybarra matizó que se refiere a juegos individuales de la escala de Horizon Zero Dawn, God of War o Red Dead Redemption 2, pero reconoció que es una idea impopular porque 70 dólares es demasiado y la propina es una práctica presente, de antemano, en muchos servicios estadounidenses.
Dicho y hecho. La mayoría de las reacciones fue adversa, reflexionando, por ejemplo, sobre la alternativa de repartir más de las ganancias a los desarrolladores, en lugar de solicitar dinero extra a los jugadores.
"O espera... podrías compartir más de las ganancias con los desarrolladores en lugar de pedir más al consumidor."
Otros preguntaron si las propinas no terminarían, precisamente, en manos de los distribuidores, cuando el desarrollador tiene, de antemano, un salario fijo. "¿Qué pasa si el juego no me gusta, me devuelven el dinero?" -preguntaron unos más-.
Los juegos suben de precio cada vez más y, sin embargo, no basta para cubrir las necesidades de la industria, pues varios ejecutivos han propuesto que, con o sin propinas, hace falta un nuevo ajuste. Mientras tanto, la industria está tratando de sortear el problema abandonando el modelo de juegos single-player, en favor de aquellos que funcionan como servicio.
¿Tú qué piensas? ¿Crees que sería justo y apropiado dar propinas a los desarrolladores, como propone Mike Ybarra?
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