Terminó la buena racha. Tras un par de años de crecimiento y extraordinarias ventas, Embracer Group, dueña de Tomb Raider, Borderlands, Lord of the Rings y Dead Island, entre varias otras marcas, anunció esta mañana el fracaso de un acuerdo de desarrollo de 2 mil millones de dólares, lo que a su vez ocasionó que la empresa perdiera más de 40% de su valor bursátil en cuestión de 10 minutos. En pocas palabras, esta mañana, la empresa vale 13 mil millones de dólares menos de lo que costaba ayer.
Aunque no se reveló la identidad de la contraparte en este monumental negocio, queda implícito que Embracer Group, por conducto de cualquiera de sus más de 100 estudios -o incluso varios de ellos- estaba por cerrar un acuerdo con otra compañía para desarrollar un proyecto o múltiples proyectos con valor de 2 mil millones de dólares, los cuales eran fundamentales para sus proyecciones a corto plazo y… bueno, ahora eso ya no existe.
Durante una videollamada con inversionistas, Lars Wingefors, director de la empresa se mostró afectado al explicar lo siguiente:
"Anoche, tarde en la noche, se nos informó que una importante asociación estratégica que había sido negociada durante siete meses no se concretará (...) Hasta altas horas de anoche teníamos un asombroso flujo de dinero, bien por encima de… bueno, debido a esa transacción. Si comparas [los números actuales] con esos números… bueno, aquello es historia, ya no es muy relevante. Pero la dinámica de ese negocio nos cambió también porque ahora tenemos más cosas pasando plenamente por nuestros propios libros de contabilidad, en lugar de hacer otras cosas"
From the investor Q&A this morning, hours after CEO Lars Wingefors apparently learned the deal had fallen through
— Stephen Totilo (@stephentotilo) May 24, 2023
Earlier, he says it's a hard time for him to be bullish, talked about what happens when you're doing a deal with people you trust
Pretty raw reaction here: pic.twitter.com/oAeMMYACyd
De la sesión de preguntas y respuestas con los inversores de esta mañana, horas después de que el CEO Lars Wingefors aparentemente se enterara de que el acuerdo se había desmoronado.
Anteriormente, mencionó que es un momento difícil para tener una perspectiva optimista, habló sobre lo que sucede cuando haces un trato con personas en las que confías.
La reacción aquí es bastante cruda.
Para rematar, Embracer Group redujo su pronóstico de ganancias para el próximo año, de un rango de entre 965 millones y 1.3 mil millones de dólares en ventas, a uno entre 655 millones y 840 millones de dólares, debido a retrasos. Una noche infame para Lars Wingefors, quien venía agrandando su empresa de manera vertiginosa.