Este año, finalmente se abrió un nuevo frente para la competencia entre Xbox y PlayStation, misma en la que Microsoft llevaba (y aún lleva) una ventaja considerable: la librería de juegos por suscripción. De hecho, como parte de un sondeo efectuado entre empresas de tecnología, salió a la luz que PlayStation estima que Xbox Game Pass controla entre 60% y 70% del mercado de las suscripciones y, por lo mismo, concluye que es casi imposible competir con él.
Un análisis con la cabeza fría sugiere que ese análisis obedece al intento de Sony por hacer ver la compra de Activision por parte de Microsoft, como un movimiento monopólico, y no refleja la realidad, pues Sony ya lanzó el nuevo PlayStation Plus, programa que por muy joven que sea, viene precisamente a competir con Xbox Game Pass.
Dicho eso, el nuevo PlayStation Plus todavía está lejos de ser comparable con Xbox Game Pass en términos de oferta de valor, así que a continuación planteamos algunas sugerencias que podrían hacer a Plus mucho más competitivo. Es importante mencionar, de antemano, que nuestra referencia será el plan PS Plus Deluxe.
1.- Una experiencia más cómoda
El volumen total de juegos que ofrece el nuevo PlayStation Plus excede por mucho al que brinda Xbox Game Pass, pero la forma en la que la librería está ordenada, la vuelve engorrosa y confusa de recorrer.
La tarjeta de presentación, por ejemplo, es la categoría "Catálogo de Juegos", en la cual hay una selección de títulos recientemente agregados. Pero tres columnas después, aparece "Catálogo de Juegos" nuevamente, sólo que ahí están el resto de los juegos de la biblioteca sin que parezca haber un criterio específico para la forma en la que están ordenados. Este es el tipo de decisión de diseño menor, pero que para el usuario distraído, abona a una experiencia confusa.
Más abajo en la pantalla principal, existe otra categoría de información, llamada "Nuevos Beneficios PlayStation Plus", donde, de nueva cuenta, se desglosan los catálogos de juegos y colecciones, sólo que categorizadas por el nivel de la suscripción que estés pagando. ¿Por qué necesito ver los descuentos exclusivos del plan Essential si yo tengo Deluxe y se supone que, por default, reciba algo mejor? Ni idea, pero ahí están, haciendo bulto y empeorando la experiencia de usuario.
En fin, el hecho es que el nuevo PS Plus encuentra la manera de hacer desordenado su intento por poner orden y se nota. Es un servicio incómodo de usar.
Aunque agradable a la vista, el menú de PS Plus está sobrado de categorías
2.- Mejorar el repertorio de clásicos
El repertorio de juegos retro es el otro tema incómodo. Mientras que Xbox ha ido bastante lejos con el fin de traer de vuelta juegos de otras generaciones y mejorarlos sin bordes ásperos, PlayStation Plus tiene una selección en la que figuran muchos títulos que se ofrecieron como recompensas de Plus en años pasados y muy pocos para generaciones anteriores. No sólo son pocos, algunos resultan un tanto irrelevantes. Por no mencionar otra tarea, aparentemente fácil, pero nuevamente mal ejecutada: el orden. Si solo quiero ver los juegos para PS1, no puedo. Si quiero ver sólo los de PS2, tampoco. Es algo básico que tal vez omitieron porque son tan pocos juegos que quizá no valía la pena.
¿Dónde están Castlevania: Symphony of the Night, Final Fantasy VII, Tekken 3, Crash Bandicoot Warped, Parappa the Rapper, Silent Hill? Eso por lo concerniente a PlayStation 1 y del 2, bueno… Resident Evil 4, God of War, Devil May Cry, Ico, y un largo, larguísimo, larguísimo etcétera.
Por supuesto, no sería astuto quemar todas las cartas de inmediato, pero lo que hay no da ni para ilusionarse y tampoco queda claro el criterio de selección. De todo lo disponible, sólo Syphon Filter, Toy Story 2, Ape Escape, Jak and Daxter, LocoRoco y un puñado de otros se perciben como auténticos clásicos que añaden valor a la membresía. El resto son o demasiado nuevos o, como dijimos, equis. Y la emulación, también, cualquier cosa.
En clásicos también hay remasterizaciones, pero no tienen ese sabor retro
3.- Resolver los defectos de la emulación
Si bien es verdad que el sistema de emulación para PS Plus no es tan malo como el de la PS Classic, e incluye funciones nuevas, como la de rebobinar, seleccionar resolución y más, aún deja que desear. Para empezar, al descargar juegos retro, existen dos versiones, lo cual es… incómodo -de nuevo, la palabra clave en mucho de esto es "confuso"-.
Pero también hay imperfecciones técnicas con las regiones de algunos juegos, la tasa de cuadros, ghosting, artefactos, problemas de texturas, modos de imagen que no funcionan correctamente, en fin. No es la experiencia tersa y sin problemas que esperaríamos de un servicio como este, lo que aunado a la falta de contenido y un criterio cuestionable de selección, da al traste con la experiencia completa y una de las prestaciones del nivel Deluxe de la membresía.
Los recuadros blancos en la parte superior derecha no son parte del diseño, son artefactos
4.- El asunto del PlayStation 3
Es bien sabido que la arquitectura Cell de PlayStation 3 era un dolor de cabeza para programar, y ese el argumento que ha impedido a Sony emular aquellos títulos en PlayStation 4 o PlayStation 5. Dicho eso, la existencia del emulador RPCS3 para PC sugiere que es posible hacerlo, sólo que PlayStation no ha volcado suficientes recursos a ello.
La omisión de todos los títulos para PS3 en los mercados donde PS Now no estaba disponible, asesta un golpe tremendo al valor que el nuevo PS Plus ofrece a sus suscriptores e incluso afecta a los mercados donde estos juegos están disponibles vía streaming, porque la experiencia simplemente no es la misma. Sony tiene que resolver esto que Xbox solucionó hace años.
Llevamos años esperando para poder jugar MotorStorm y parece que seguiremos esperando
5.- Exclusivas en Día 1
Sony no factura lo mismo que Microsoft y, por lo mismo, tiene sentido que prive a su membresía de un beneficio que hoy parece tan básico como el de recibir exclusivas first-party en su día de lanzamiento. PlayStation no puede sacrificar ese dinero, cuando es el pilar de todo Sony. Es así de sencillo.
Dicho eso, tiene que buscar una manera de compensar, porque cuando analizas el servicio desde la óptica del consumidor ocasional en Latinoamérica, es un programa que ni tiene una buena selección de juegos retro, pero tampoco hay exclusivas. Microsoft no sólo es mejor en ambos frentes, sino que tarde o temprano podrá lanzar Call of Duty en Xbox Game Pass desde el Día 1. Los "demos" no sirven para balancear la ecuación.
¿Cuál sería la solución? Bueno, ganarle a Xbox la carrera por los third party, una carrera en la que ya va muy rezagado pues Microsoft ya tiene ahí, juegos que, incluso, solían ser exclusivos de PlayStation. Y no se trata de "competir con el gigantesco e invencible Call of Duty", sino de ser ingeniosos y tener buen ojo, como con Stray, un título indie que nadie tenía en el radar, que seguramente involucró un pago de licencia modesto y que fue la sensación hace algunas semanas.
Exclusivas en día 1 sería un punto inflexión brutal para PS Plus, pero PlayStation no puede seguir ese camino
Que no se malentienda: el nuevo PS Plus es un paso en la dirección correcta y, francamente, en la única dirección que Sony podía ir para asegurar su supervivencia. Con una librería de 700 juegos en su categoría más completa, la membresía no puede pasar desapercibida, pero por sus recursos y estrategia, PlayStation no puede darse el lujo de quedar corto en aspectos que están bajo su control. Algo a lo que agregaríamos, también, el tema de los precios, que hoy siguen en dólares y, estamos seguros, alejan a un segmento del mercado en cada país donde la marca opera.
A tan solo un par de meses de su implementación, podríamos decir que el nuevo programa de PS Plus todavía está en pañales, pero considerando que PlayStation está arrancando desde los pits, no puede esperar demasiado.