La prueba de que Starship Troopers es una obra maestra de la sátira es algo de lo que mucha gente todavía no se da cuenta. Y no es para menos: basta ver que su director, Paul Verhoeven, venía de hacer lo propio en la fabulosa Robocop. El problema es que ambas sagas siguieron su propio camino sin Verhoeven al mando... Y ahí fue cuando ocurrió la magia.
Próxima parada: Ciudad Delta
Muchos creen que Starship Troopers se quedó como una película única, pero lo cierto es que sus secuelas son clásicos que se estrenaron directo en video: tuvo cuatro partes más, otros cuatro videojuegos y una serie animada de televisión para adultos. ¿Quieres saber más? Atento, porque en la quinta parte, Traitor of Mars, la saga se fusionó con el universo de Robocop.
En una escena de Traitor of Mars
Ahí lo tienes: además de los viajes a Venus, Estambul o Bonn, tenemos un viaje retrasado a Delta City, la ciudad donde vivió Alex Murphy antes de convertirse en Robocop. Ah, y tiene otra cosa en común con Starship Troopers: su saga también se ha ampliado con tres películas, un remake, cuatro series (dos animadas y dos live-action) y nueve videojuegos.
Nadie lo entiende, pero esta película de ciencia ficción es fantástica: podría haber sido una franquicia, pero el director no estaba preparado para ello.
Por cierto, si hacemos caso a estas pequeñas pistas, en uno de los juegos, Robocop se enfrenta a Terminator, lo que significa que la saga de James Cameron está en el mismo universo que Starship Troopers. ¿No es maravilloso lo lejos que se puede llegar con un pequeño detalle?