A lo largo de las últimas semanas, se ha hablado muchísimo sobre el pleito entre Microsoft y Sony, pero más allá de algunos dimes y diretes, Activision no había emitido una postura oficial respecto a todo lo sucedido… hasta ahora. Como parte de una actualización en la web oficial del publisher de Call of Duty, Bobby Kotick, director de la empresa, habló sobre todo el asunto. En pocas palabras, desmintió los alegatos de Sony, se dijo decepcionado, pero aseguró que no habrá resentimientos.
En particular, Kotick hizo referencia a las inquietudes sobre paridad que Sony manifestó ante la CMA británica y dijo que su compañía sería incapaz de lanzar versiones buggeadas de Call of Duty para perjudicar a los fabricantes de PlayStation.
"Todos sabemos que nuestros apasionados jugadores serán los primeros en hacer responsable a Microsoft por cumplir con sus promesas de contenido y paridad cualitativa. Y todos nosotros, quienes trabajamos tan duro para entregar los mejores juegos en la industria, nos preocupamos muchísimo por nuestros jugadores, como para lanzar versiones mediocres de nuestros juegos."
Bobby Kotick siguió adelante y se refirió al reporte de una ejecutiva de la compañía, quien hace semanas aseguró haber escuchado a Jim Ryan, cabeza de Sony Interactive Entertainment, declarar que no le interesaba Call of Duty, sino en boicotear la fusión entre Microsoft y Activision. La única prueba de ello es dicho testimonio, pero ni Ryan ni PlayStation se han esforzado por desmentirlo.
"Obviamente, esta es una conducta decepcionante de un socio de casi 30 años, pero no permitiremos que este comportamiento afecte nuestra relación con Sony. Los jugadores de PlayStation saben que continuaremos entregando los mejores juegos posibles en las plataformas de Sony, mientras lancemos juegos en PlayStation"
La compra de Activision por parte de Microsoft
Microsoft anunció la compra de Activision hace un año, pero no se ha podido concretar porque su monumental escala de casi 70 mil millones de dólares, la ha puesto bajo la lupa de órganos reguladores internacionales y, por supuesto, de Sony, principal competidor de Xbox.
Aunque al comienzo los cielos parecían estar llenos de nubarrones para Microsoft, de a poco, ambas compañías ven la otra orilla, con la CMA desestimando algunas de sus inquietudes originales, si bien, la Comisión Federal de Comercio llevará a Microsoft a juicio en agosto.