Entre entusiastas del manga y anime, uno de los aspectos más llamativos es ver a sus artistas favoritos dibujar a personajes famosos, tal y como ha sucedido incontables veces con Dragon Ball, siendo tan famoso como siempre. Bills, el Dios de la Destrucción, es uno de los "villanos" más populares del momento, y el mangaka de One Punch Man aprovechó esto para dibujarlo con su propio estilo.
Yusuke Murata tiene más que One Punch Man en su repertorio de adaptaciones, pero sin dudas, todos lo reconocen por dibujar personajes corpulentos con facciones corporales muy llamativas (con obvias excepciones), algo que el gato morado... no tiene precisamente. Si bien Akira Toriyama representó a Bills de una forma discreta y elegante, vemos algo completamente distinto con lo hecho por Murata.
Bills es un Dios de la Destrucción, y como tal, debería lucir imponente, ¿no? Toriyama no atacó esta idea, por lo que incluso lo vimos convivir sin asustar como debía cuando se presentó ante los Guerreros Z durante el cumpleaños de Bulma. De haberse visto como Murata lo imagina, las cosas habrían cambiado drásticamente durante el inicio de Dragon Ball Super.
Ni siquiera su hermano Champa se ve tan imponente; sabemos que Bills pertenece a una raza que quizás jamás veremos debido al salto de tiempo de incontables años que sabemos el gato ha permanecido como Dios de la Destrucción, pero el manga bien podría traernos una sorpresa tras hacer a un lado las travesuras de Goten y Trunks.
A pesar de convertirse en un personaje secundario, Bills jamás concluyó su batalla contra Goku, y vaya que el saiyajin se ha vuelto más fuerte desde que se convirtió en Super Saiyajin Dios. Por otro lado, Freezer permanece como una amenaza fuerte en la historia actual, y todos sabemos que él y Bills tienen una... relación cercana, una razón más que podría aprovechar Toriyama para darle al gato morado su protagonismo de vuelta.