Dragon Ball Z nos sorprendió en la saga de Majin Buu con un salto en el tiempo de 7 años desde la derrota de Cell a manos de Gohan, y además del crecido hijo de Goku, uno de los momentos que nos dejó boquiabiertos fue no sólo que Número 18 seguía presente en la historia, sino que incluso tuvo una hija. ¿No se supone que era un androide? ¿Cómo fue esto posible?
Dragon Ball: Número 18 siempre fue humana
Quiás haya sido el paso de los años, o que muchos fans no prestaron la debida atención en los capítulos previos a los emocionantes combates que dieron cierre a Dragon Ball Z, pero la serie fue muy clara explicando lo que Akira Toriyama no quiso dejar como otro de tantos misterios que ya había acumulado el anime a estas alturas: Número 18 nunca dejó de ser humana.
¿A qué nos referimos? Si bien el Dr. Gero experimentó con 18 tras secuestrarla junto con su hermano gemelo, estos dos androides conservaron varias partes humanas dentro de su cuerpo; no te confundas con Número 16, quien sí fue un androide en su totalidad y jamás fue un humano como 17 y 18.
Tras una vida como delincuente, Número 18 ahora tiene una familia
En otras palabras, o más bien las del mismo Krillin explicándole a Goku esta precisa cuestión, Número 18 sí es un androide, pero conservó muchas partes humanas tras ser parte de los experimentos de la Patrulla Roja, y convenientemente para nuestro calvo amigo, una de esas partes fue su aparato reproductor femenino, lo que le permitió quedar embarazada y tener una hija.
Esto permitió a Número 18 convertirse en madre, y no, su hija Marron no es un androide. Esto también explica que tanto madre e hija envejezcan en Dragon Ball GT (aunque no sea canon), y posiblemente explique a su vez que Número 17 también puede ser padre.