No es ningún secreto que Halo Infinite ha tenido sus problemas, y aunque no podemos saber si guarda relación con ello, Tom French, el director creativo de multijugador, ha anunciado su renuncia a 343 Industries, luego de una trayectoria de 11 años y medio.
"Luego de 11 años y medio en Halo, me quito mi armadura de Spartan por última vez, hoy, para emprender nuevas aventuras. Ha sido un masivo honor haber sido parte del juego que amé tanto como jugador, y admiré tanto como desarrollador. No podría estar más orgulloso de mi tiempo en 343".
After over 11 1/2 years on Halo, I step out of my Spartan armor for the last time today to head off to new adventures. It's been a massive honor to have been part of a game I loved so much as a player and admired so much as a developer. I couldn't be more proud of my time at 343. pic.twitter.com/2CBD7kOPIj
— Tom French (@pardontomfrench) December 2, 2022
Cualquiera que sea el caso, lo cierto es que French deja Infinite con dignidad, habiendo entregado una Temporada 3 cargada de contenido pendiente, como la campaña cooperativa y la beta de Forge, la herramienta de creación de mapas. Se trata de 2 de las omisiones más criticadas al momento del lanzamiento.
Halo Infinite no tuvo un desarrollo sencillo y tampoco un lanzamiento sencillo. La progresión multijugador fue muy criticada y el camino a la redención ha tomado tiempo, pero en una era como la actual, se vale redimirse a destiempo y eso es, precisamente, lo que Halo Infinite parece estar logrando.
¿Qué sigue para French?
Bueno, a no ser que French haya terminado plenamente desencantado con el desarrollo de videojuegos -al estilo Michel Ancel- French debería ser fichado por alguna otra compañía, después de todo, 343 Industries no fue su primer rodeo.
El desarrollador estadounidense pasó más de un año en Xbox Game Studios, casi 6 años en Pandemic, 7 años en Black Isle Studios y uno en Interplay, que fue su primer trabajo. El tipo ha sido de todo: programador, diseñador en jefe, guionista, director de diseño, de misiones, etcétera.
No está de más recordar que, durante la producción de Halo Infinite, hubo reportes de mucho desorden al interior de 343 Industries, así como de mucha tensión, una situación que seguramente no mejoró tras las demostraciones tempranas del producto, que dejaron muchas críticas.