La ofensiva contra PlayStation aún no se detiene, pues la compañía acaba de sufrir otro golpe bajo; cerca de 6,8oo empleados de la compañía sufrieron de una filtración masiva que dejó completamente expuesta toda su información personal, y aunque Sony ya está remediando la situación, el daño está hecho, y lógicamente se desató todo un escándalo dentro de la compañía.
De acuerdo con el reporte, el responsable de este ataque fue CLoP, una organización ransomware que anunció el pasado mes de junio haber obtenido con éxito la información de los empleados de Sony. Desconocemos el progreso de la situación en los meses previos a la noticia de hoy, pero ahora que se dio el golpe, Sony tiene las manos llenas ofreciendo apoyo a los afectados.
"El 2 de junio de 2023, Sony Interactive Entertainment descubrió la descarga ilegal de información, e inmediatamente desconectó la plataforma y remedio la vulnerabilidad. Una investigación se llevó a cabo tras el suceso con asistencia de expertos en ciberseguridad, y también se llevó a cabo un refuerzo legal [...] Una vez que SIE identificó los archivos descargados, comenzamos un proceso para determinar qué tipo de información se filtró y a quién le pertenece"
Sony intenta remediar la situación
El reporte continuó mencionando que el ciberataque se llevó a cabo en la plataforma MOVEit, y ningún otro sitio fue afectado por los hackers. Además, Sony está monitoreando la información filtrada de sus empleados para remediar cualquier intento de robo o fraude en cuanto se dé a conocer, una asistencia bien recibida, pero que sin dudas no le quita la preocupación a los casi 7,000 afectados.
¿Por qué hay tantos ataques hacia PlayStation?
Este ciberataque marca la segunda ofensiva reciente contra Sony y PlayStation: una organización diferente de hackers confirmó hace algunos días haber obtenido los planes de desarrollo de PlayStation de aquí a un futuro incierto, y amenazó con filtrarlo todo si la compañía no ofrecía una remuneración por la información. Desconocemos cómo terminó esa situación, pero de no llegar a un acuerdo, podríamos terminar con un escándalo al nivel de lo que sufrió Xbox igualmente hace unos días.