La 2DS tiene un truco de diseño que nos engañó a todos: Nintendo rompió una de sus reglas

Todos los gamers tienen una o dos portátiles favoritas de Nintendo. Independientemente si es la clásica Game Boy o la 3DS, la compañía de Kioto es la más experta en entretenimiento móvil. Aunque, las consolas de los creadores de Mario se identifican por tener una alta calidad de diseño y estrictos estándares de fabricación, hubo una portátil que se rebeló contra esos códigos.  

Con ambas versiones de la Nintendo Switch en el mercado, para la empresa japonesa ya no es necesario devolverse al mercado de las portátiles. Aunque, cualquiera pensaría que Nintendo se fue con un resultado perfecto en este segmento, una de las ediciones de sus consolas escondía un pequeño truco de diseño que nos engañó a todos.

La consola de Nintendo que no es lo que parece

En 2011, la compañía nipona lanzó la Nintendo 3DS, una portátil que brindó una experiencia basada en tecnología estereoscópica para jugar títulos en tercera dimensión. Como no todos sus usuarios estuvieron a favor del 3D, tuvieron que salir con una alternativa que fuera compatible con los juegos de esta consola y eliminara tal función. 

Por ello, en 2013, Nintendo estrenó la 2DS, una opción más económica para disfrutar los títulos de la 3DS. Sin embargo, esta consola no es lo que parecía. Contrario a otras versiones de la Nintendo DS, la portátil tenía una sola pantalla táctil LCD, la cual se dividió con una carcasa plástica que simular ser dos al mismo tiempo.

Con este truco en la 2DS, Nintendo se ahorró costos en fabricación, componentes y cableado, y también se permitió venderla más barata. Además, fue pensada específicamente para los jugadores más pequeños, debido a que el dispositivo no tenía la icónica bisagra de la línea DS con la que se dobla a la mitad, haciéndola más resistente.

La regla que Nintendo rompió con la 2DS

Como ya se mencionó, la 2DS fue una excepción de diseño en la serie de consolas portátiles de la compañía japonesa. No obstante, algunos fans declararon que su estructura era “anti-Nintendo", ya que fue la primera portátil en romper con la estética plegable de las DS. Pese a las críticas, la 2DS funcionó de forma eficiente para su público objetivo, porque incluso entre los niños más inquietos fue un dispositivo difícil de romper.