El asunto de las condiciones laborales dentro de las empresas de videojuegos ha cobrado mucha relevancia a lo largo de los últimos años y Nintendo ya no está libre de problemas, pues en semanas recientes salieron a la luz reportes sobre tratos desiguales y malas condiciones laborales entre sus trabajadores temporales. Reggie Fils-Aimé, expresidente de la compañía, ha sido cuestionado al respecto.
Como parte de una entrevista motivada por la publicación de sus memorias, el tabloide estadounidense The Washington Post cuestionó al ejecutivo sobre el escándalo actual que Nintendo protagoniza. "Mientras leía las historias y los reportes, me di cuenta de que esa no era la Nintendo de la que yo me fui", declaró quien fuera presidente entre 2006 y 2019. "Esa división entre empleados de tiempo completo y temporales -lo único que puedo decir es que esa no es la cultura que yo dejé cuando me fui de Nintendo".
Fils-Aimé señaló que cuando él estaba en la empresa, incluso había comidas bimestrales y trimestrales con los empleados. "Yo sé que fui capaz de alcanzarla (una cultura saludable) y lo que se está describiendo, ciertamente no luce como una cultura saludable", añadió.
Si cuesta creer que esto pudiera pasar desapercibido o que no existiera durante la administración de Fils-Aimé es porque, en efecto, los reportes apuntan a que el maltrato data de varios años atrás y, al respecto de las comidas, los empleados temporales señalan que nunca supieron que ellos pudieran asistir y ni siquiera tenían acceso al edificio donde se llevaban a cabo.
El escándalo con respecto a la manera en la que Nintendo de América trata a sus empleados comenzó cuando un trabajador temporal acusó a la compañía de haberlo despedido por haber hecho comentarios sobre sindicalización. Nintendo negó los señalamientos, pero investigaciones de Kotaku e IGN arrojaron testimonios de docenas de empleados, quienes reforzaron la noción de que la Gran N tiene dobles estándares entre sus trabajadores, obligando a los temporales a firmar contratos de 11 meses y sin prestaciones básicas, como cobertura de gastos médicos.
Nintendo no es la única compañía que hoy afronta acusaciones por condiciones laborales y posible sindicalización. Activision-Blizzard está en el ojo del huracán y dentro de la compañía ya también hay grupos que buscan sindicalizarse, una medida que no suele ser bien vista por las empresas. Reggie Fils-Aimé hoy se desempeña como autor y consultor de varias compañías.