Seguramente has escuchado el dicho "si cortas una cabeza, salen dos más", y es que esto es precisamente lo que sucedió tras la caída de Yuzu, el emulador de Nintendo Switch que tuvo que desaparecer debido a una fuerte demanda de Nintendo. Esto causó el descontento de un enorme grupo de jugadores, y tal y como muchos asumieron, la caída del emulador sólo provocó el nacimiento de otros, mismos que ya comenzaron a promocionarse en foros y redes sociales.
Te resumimos la historia: Nintendo siempre ha estado en contra de la piratería y ha movido mar y tierra para preservar sus juegos fuera del mundo de la emulación. Yuzu fue el que más destacó en la generación de Nintendo Switch, ofreciendo a los jugadores la posibilidad de disfrutar del catálogo de la híbrida sin necesariamente poseer la consola. Esto obviamente no fue bien visto por la Gran N, pero el punto de quiebre llegó con la emulación de The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom, lo que culminó con una demanda a Yuzu que resultó en su desaparición absoluta.
Ahora bien, tras esta situación, muchos jugadores se enfurecieron con Nintendo: no discutiremos quién tiene la razón en este escándalo, pero el daño ya está hecho, y la caída de Yuzu provocó el nacimiento de nuevos emuladores de Nintendo Switch: programas como Nuzu y Suyu se encargaron de mantener viva la llama, ofreciendo exactamente lo que hacía Yuzu con su comunidad, y obviamente, estos emuladores están honrando el trabajo del original desde la elección de sus nombres.
Nintendo contra la piratería: una batalla interminable
No sabemos cómo lidiará Nintendo con este problema, pero si algo hemos aprendido de la industria, es que acabar con la piratería es un trabajo que no se resuelve con una sola demanda; muchos conocen la historia de Gary Bowser, pero a pesar de todo el esfuerzo de la Gran N, el mundo de la piratería quedó básicamente intacto.
Los hijos de Yuzu ya aparecieron, ¿pero qué hará Nintendo al respecto?
Con el cierre de Yuzu, también habrá que despedirnos del emulador Citra para Nintendo 3DS (mismos desarrolladores), y así como sucedió con Switch, sin dudas nuevos emuladores de la portátil de Nintendo aparecerán como reemplazo. Ya veremos cómo continúa esta historia, pero algo luce muy claro: los jugadores no permitirán que la emulación de videojuegos desaparezca.
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