Como en esta vida no hay plazo que no se cumpla, el tan ansiado final de Dragon Ball Daima ha llegado. El capítulo 20 se estrenó este 28 de febrero, cerrando la más reciente aventura de Goku y compañía en el Reino Demoníaco. Sin embargo, el desenlace ha dividido a los fanáticos, no solo por su inesperada resolución, sino porque marca el cierre del último trabajo de Akira Toriyama, el creador de esta legendaria saga.
Alerta de spoilers: El siguiente texto contiene información de lo ocurrido en el capítulo 20 de Dragon Ball Daima.
El polémico final de Dragon Ball Daima
Desde su anuncio, Dragon Ball Daima generó una gran expectativa. Se nos prometió una historia fresca, con un regreso a los orígenes de la serie, pero con un giro completamente nuevo. Y así fue: vimos a nuestros héroes convertidos en versiones más jóvenes de sí mismos, enfrentando amenazas en un mundo distinto a lo que habíamos visto antes. La serie no estuvo exenta de momentos épicos, giros inesperados y combates espectaculares, pero su final dejó más preguntas que respuestas.
El episodio final nos regaló una de las batallas más frenéticas de la serie. Goku, en su poderosa transformación de Super Saiyajin fase 4, se enfrentó al temible Rey Gomah, el antagonista definitivo de la historia. Por su parte, Piccolo tenía la misión crucial de asestar tres golpes en la nuca del Rey Demonio para despojarlo del poder del Tercer Ojo. Sin embargo, contra todo pronóstico, falló en su intento, dejando la resolución del conflicto en manos de un personaje inesperado: Majin Kuu.
Majin Kuu, un demonio aparentemente enclenque pero sumamente inteligente, creado por Arinsu, se convirtió en el inesperado héroe de la historia. Contra todas las expectativas de los fanáticos, no fue Goku, ni Vegeta, ni una fusión espectacular quien derrotó al villano final, sino este personaje que, hasta ese momento, parecía más un alivio cómico que un verdadero contendiente. La escena que definió la batalla fue tan inesperada como controvertida: Majin Kuu usó un simple libro para dar el golpe final al Rey Gomah. Sí, un libro.
Este desenlace ha generado un gran debate entre los seguidores de la franquicia. Algunos lo consideran una decisión valiente, un giro narrativo que rompe con los clichés tradicionales de Dragon Ball, donde las peleas suelen resolverse con poderosos ataques de energía. Otros, en cambio, sienten que se ha desperdiciado una oportunidad de ofrecer un cierre más épico y acorde con la historia de la franquicia. La ausencia de una fusión entre Goku y Vegeta o de una última transformación espectacular dejó a muchos con un sabor agridulce.
A pesar de la controversia, el capítulo final también dejó pistas sobre lo que podría venir en el futuro. La escena postcréditos insinúa que este no es realmente el final de la historia, dejando abierta la posibilidad de una segunda temporada de Dragon Ball Daima o incluso una nueva serie dentro del universo de Dragon Ball.
La gran incógnita ahora es qué sigue para la franquicia sin la presencia de Akira Toriyama. ¿Se mantendrá su esencia o veremos un cambio radical en el futuro de Dragon Ball? Lo cierto es que, polémico o no, el final de Dragon Ball Daima ya está dando de qué hablar y, como siempre, Goku y sus amigos siguen siendo parte fundamental de la cultura pop mundial.
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