Dragon Ball GT siempre ha sido polémico. Para algunos es una continuación no canónica que jamás debería haberse contado; para otros, un cierre emotivo que, aunque imperfecto, logró capturar la esencia aventurera de la saga original. Y dentro de ese debate eterno, hay un momento que aún hoy sigue generando preguntas: ¿qué pasó realmente con Goku al final de GT?
Los fans tienen una teoría sobre el final de Dragon Ball GT
El último episodio de GT nos dejó una de las escenas más enigmáticas de todo Dragon Ball: tras derrotar al Dragón de una Estrella con la Henki Dama Universal, Goku desaparece junto a Shen Long sin dar mayor explicación. ¿Murió? ¿Ascendió? ¿Se convirtió en algo más? Akira Toriyama nunca ofreció una respuesta oficial porque básicamente el no tuvo nada que ver con este anime. Sin embargo, los fans han creado una teoría que, aunque no es canon, se siente extrañamente coherente y emocional.
Según esta interpretación, Goku habría hecho un trato con Shen Long en el mismo instante en que el dragón apareció para salvar a la humanidad. El acuerdo sería simple pero profundo: él regresaría a la vida tras el ataque final del Dragón de una Estrella, pero a cambio se convertiría en el guardián eterno de las Esferas del Dragón. En otras palabras, Goku dejaría de ser un simple guerrero para convertirse en parte del propio mito que sostuvo la franquicia desde sus inicios.
Esta teoría explicaría varios detalles sutiles del final. Por ejemplo, el hecho de que el ataque final del Dragón de una Estrella no le hiciera daño a Goku, como si ya no perteneciera al plano mortal, o la manera en que Shen Long le pregunta si “ya pueden irse”, sugiriendo que, en ese momento, ambos se convierten en una sola entidad. Es una lectura que da un tono mucho más espiritual y poético al cierre de GT, transformando una despedida confusa en una especie de ascensión.
Lo interesante es cómo esta teoría conecta con otros momentos de la franquicia. Dragon Ball siempre ha jugado con la idea de trascender los límites humanos: primero con los saiyajin, después con los dioses de la destrucción y, finalmente, con figuras como Zeno. Convertir a Goku en guardián de las Esferas sería, en cierto modo, el último paso lógico para un personaje que ya había superado todas las barreras posibles.
Más allá de su veracidad, este tipo de teorías demuestran algo importante: Dragon Ball sigue vivo gracias a sus fans. Incluso en series tan discutidas como GT, los seguidores encuentran nuevas formas de reinterpretar lo que vieron hace décadas. Y lo mejor es que estas conversaciones siguen vigentes en plena era de Daima y Super.
Ver 0 comentarios