Rod Fergusson, gerente general de la franquicia Diablo durante los últimos cinco años, anunció su salida de Blizzard Entertainment. La noticia fue confirmada por el propio Fergusson a través de sus redes sociales el pasado viernes 8 de agosto, en donde compartió un mensaje de agradecimiento y se mostró orgulloso del trabajo realizado e n el último lustro dentro de la compañía.
El adiós de Fergusson en Blizzard
Fergusson se unió a Blizzard en 2020, después de una larga trayectoria en la industria de los videojuegos. Antes de su llegada, trabajó en la franquicia Gears of War como parte del estudio The Coalition bajo Xbox, y previamente en Epic Games, participando en el desarrollo y consolidación de una de las sagas más reconocidas de la marca, y siendo considerado uno de los grandes artifices de la misma. En su mensaje se puede leer lo siguiente:
“Tras cinco años impulsando la franquicia Diablo con cuatro grandes lanzamientos, es hora de dejar Blizzard/Microsoft con la espada en la mano y ver qué sigue. Los equipos están preparados para el éxito, con un emocionante calendario de lanzamientos por delante. Estoy increíblemente orgulloso de lo que hemos creado juntos y estoy deseando ver qué nos depara el futuro a Diablo y a mí”. publicó Fergusson en sus redes sociales.
Durante su gestión en Blizzard, Fergusson supervisó cuatro lanzamientos importantes dentro de la franquicia Diablo, en un período que incluyó tanto nuevos títulos como expansiones y actualizaciones de gran relevancia para la comunidad de jugadores. Aunque no se han dado cifras concretas, Diablo IV, por ejemplo, ha sido uno de los lanzamientos más exitosos en la historia reciente de la compañía, manteniendo un papel destacado en el catálogo de Blizzard.

Hasta el momento, Blizzard no ha anunciado un reemplazo para Fergusson ni ha ofrecido detalles sobre los motivos de su salida. El propio directivo no ha especificado sus próximos proyectos, aunque en su mensaje dio a entender que continuará vinculado a la industria del videojuego.
La salida de Fergusson se produce en un contexto particular para Blizzard, que forma parte de Microsoft tras la adquisición de Activision Blizzard en 2023. En los últimos meses, la compañía ha estado reorganizando algunos de sus equipos y proyectos, mientras mantiene un calendario de lanzamientos que, según el exgerente general, seguirá siendo emocionante para los seguidores de Diablo.
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