Nick Pearce era un abogado cansado de su rutina en Australia, hasta que un buen día decidió renunciar a su trabajo para dedicarse por completo a la creación de un videojuego basándose en un mod de The Elder Scrolls V: Skyrim. El resultado fue The Forgotten City, un título que no solo ha sido aclamado por la crítica, sino que ha recibido premios en su país de origen.
Su nombre es The Forgotten City, y es uno de los orgullos de Australia
Nick Pearce decidió dejar su empleo como abogado para convertirse en desarrollador de videojuegos independiente. Para lograr su objetivo, Pearce utilizó como base un mod de The Elder Scrolls V. De esta manera fue como nació The Forgotten City, un título que ha recibido favorables comentarios por parte de público y crítica, más de 3 millones de descargas en Steam, y el premio Australian Writer's Guild.
El juego le costó a Nick Pearce un trabajo constante de 80 horas semanales, lo cual tiene todo el sentido del mundo cuando descubres que solo el guion de The Forgotten City cuenta con alrededor de 35 mil palabras. Fue así como un simple pasatiempo terminó por convertirse en el sueño de un desarrollador independiente.
Con una calificación del 85% en Metacritic, una nominación al mejor juego del año en los Premios Bafta 2021, y una excelente recepción por parte de la comunidad de Steam, The Forgotten City permitió a Nick Pearce abrir su propio estudio: Modern Storyteller, conformado por, aparte de Pearce, dos personas más: Alex Goss y John Eyre. Lo cierto es que este es un ejemplo más de que, con pasión, ingenio, por supuesto: dinero, y disponibilidad, cualquiera es capaz de generar un gran impacto en la industria de los videojuegos.
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