¿Alguna vez has escuchado a una bestia cantar como un ángel? Si tu respuesta es afirmativa, seguramente eres fan del heavy metal, un género musical que confronta lo que preferimos ignorar y que celebra aquello que normalmente negamos. Para muchos es el motor de su existencia y para los que jugamos videojuegos, es un buen indicador de que estaremos frente a un buen título o por lo menos uno que tendremos que añadir a nuestra colección.
¿Cómo podría un nuevo título desafiar al Doom Slayer? Pues apostando por la música, justo como hicieron los amigos de The Outsiders, estudio sueco a cargo de Metal: Hellsinger, un FPS de ritmo con sangre metálica de alto octanaje. ¿Es tan bueno como suena? ¿Acaso el género sigue siendo lo suficientemente atractivo como para llamar a las huestes de jugadores? Prepara tus mejores audífonos porque te vamos a reventar los tímpanos y de paso te contaremos si vale la pena.
La carnicera de roja
En Metal: Hellsinger tomaremos el papel de la Extraña, una demonio que emprende una cruzada en el infierno para recuperar su voz y saldar cuentas con la Inquisidora Roja. Para ello tendrá que recorrer los ocho infiernos y derrotar a un montón de demonios hasta llegar al trono de la Inquisidora y enfrentarla. La trama del juego no es precisamente la más profunda y está lejos de ser el elemento más destacado de este título.
La débil construcción narrativa es más evidente cuando el estudio utiliza algunos recursos simplones para explicar los motivos de la protagonista. Por ejemplo, para contarnos porqué la Extraña llegó al infierno, el estudio se dio el lujo de aplicar la vieja y confiable de "por alguna razón". Una trama un poco más elaborada se hubiera agradecido.
Sí, nos hubiera encantado que la trama de Metal: Hellsinger nos hiciera soltar una lágrima o algo por el estilo, sin embargo, no creemos que esta sea un elemento que le reste brillo al tremendo cromado que tiene el juego: su gameplay. Piensa en la trama como si fuera un taco de calidad con una buena salsa, una gran tortilla, poca carne, pero mucho sabor.
El cráneo y los canes del infierno
Ahora, pasemos a la mera carnita de este tremendo manjar: su gameplay. Como te contábamos, Metal: Hellsinger es un juego de disparos en primera persona cuya principal característica es el ritmo. ¿Qué significa esto? Que en la pantalla del juego aparece un indicador que parpadea al compás de la música. Al momento de accionar alguna de las armas, deberás hacerlo en el momento exacto para que tu disparo haga un daño perfecto. Si pierdes el ritmo, tu arma no hará el daño completo y perderás tu combo rítmico, lo que se traduce en una menor cantidad de puntos al final de cada partida. Todos los movimientos giran alrededor del ritmo, incluso las ejecuciones que pueden ocurrir tras "ablandar" a los demonios con unos buenos espadazos. En el momento en que aparezca la opción de realizarla tendrás que hacerlo de una forma precisa, de lo contrario perderás la oportunidad.
Aquí es donde está el verdadero reto. Mientras evades los ataques enemigos, tendrás que esforzarte para no perder la cadencia de los disparos y así erradicar a todos los demonios hasta llegar al jefe de cada escenario: una de las apariciones de la Inquisidora Roja.
Es como si Guitar Hero hubiera tenido un hijo con Doom: mientras más tiempo mantengas el ritmo, más alta será tu puntuación final. Obviamente, la música es la protagonista de esta mecánica y mientras mejor juegues más frenética y clara se escuchará. Si tu barra de salud se comienza a vaciar, la música se escuchará diferente y te será más difícil mantener el ritmo. Claro que al principio te será difícil dominar la mecánica principal del juego, pero no te preocupes, con un par de partidas estarás más que listo para desatar todo el poder del heavy metal. Estamos frente a una propuesta fresca, interesante y sí, adictiva.
Metal: Hellsinger como si Guitar Hero hubiera tenido un hijo con Doom
En cuestión de movilidad, Metal: Hellsinger es una maravilla. Podrás mover a la Extraña por el escenario a gran velocidad realizando un sprint y un salto doble que te permiten recorrer todo el mapa y esquivar los ataques enemigos. Disparar no es cosa de otro mundo: con el gatillo derecho accionas tu arma y con el izquierdo puedes invocar un ataque especial, cuando llenes la barra indica, por supuesto. Lo que quizá no es tan simple es la forma en la que puedes cambiar entre cada una de estas herramientas de muerte.
Las armas de Metal: Hellsinger son una cosa deliciosa
Al momento de iniciar cada partida podrás equipar hasta dos armas, siendo un total de cuatro las que puedes llevar a cada infierno. El problema llega al momento de intercambiar entre cada una de ellas, ya que en muchas ocasiones esto llega a ser un poco confuso y se convierte en un distractor que te hace perder el ritmo de tus disparos. En este sentido, nos hubiese gustado que la interfaz fuera un poquito más sencilla para enfocarnos en lo que realmente importa: la música.
En total tendrás que explorar ocho infiernos -nueve si cuentas el tutorial. Cada uno supondrá un reto más interesante que el anterior y que podrás superar en alrededor de 30 minutos. Sí, es un juego corto, pero podrás dedicarle muchas horas adicionales gracias a los Tormentos -tres desafíos especiales en cada infierno- y a los marcadores globales que, para los jugadores más competitivos, desencadenará una auténtica adicción.
Ahora, el juego también ofrece cierta “ayuda” para todos aquellos que, como quien escribe estas líneas, tienen problemas para seguir el ritmo. Metal: Hellsinger permite configurar la latencia del indicador de ritmo para que se ajuste mejor a tu frenética personalidad. Además, también puedes equipar sigilos que a grandes rasgos son ventajas que obtienes al superar tormentos y que te permiten, por ejemplo, mantener tu combo rítmico durante más tiempo.
Sugerimos siempre equipar a The Hounds para hacer daño a distancia
¿Y qué pasa si el desafío supera al jugador? Si la Extraña cae en batalla, podrás revivirla en dos ocasiones a cambio de unos buenos puntos, lo que te hará descender en el marcador global. Un toquecito arcade que eleva el sabor del juego.
Definitivamente estamos ante a una propuesta sobresaliente dentro del género que quizá no rompe la rueda, pero sí nos entrega una alta dosis de innovación con sabor agradable y que te mantendrá pegado al control durante más de ocho horas, tiempo suficiente para terminar la campaña del juego.
Me gusta como brilla la sangre de demonio con esta luz
Por último está el apartado estético del Metal: Hellsinger. No creemos estar exagerando al decir que el estudio colocó especial cuidado al diseñar su propia versión del infierno. Claro que la temática te remitirá de inmediato a los títulos de id Software, pero, sin lugar a dudas, creemos que Metal: Hellsinger logró establecer su propio estilo. Los escenarios, la Extraña, los enemigos y las diferentes apariciones de la Inquisidora Roja lucen muy bien y te podemos decir que estamos deseoso de imprimir uno de estos diseños para colocarlo en la pared de nuestra oficina. Nosotros estuvimos jugando en un Xbox Series S y te podemos contar que el juego corre de maravilla en una pantalla 4K y a 60 cuadros por segundo. Lo mejor es que se incluyen dos modos: el modo rendimiento y el gráfico, para que los usuarios puedan elegir la configuración que más les guste.
En cuanto a errores dentro del juego, nosotros no encontramos alguno que valga la pena reportar, el juego está muy bien optimizado y se nota que The Outsiders puso especial atención al momento de limpiar los bugs.
Ahora, en cuanto a la música, éste podría ser uno de los videojuegos con mejor banda sonora de lo que va del 2022. Si eres fan del heavy metal este título te va a enamorar por la participación de algunos de los cantantes más prestigiosos del género. Las melodías están compuestas por el dúo Two Feathers y cuentan con la participación de Randy Blythe, de Lamb of God; Matt Heafy de Trivium; Tatiana Shmayluk de Jinjer; Björn Strid de Soilwork; Mikael Stanne de Dark Tranquility; Dennis Lyxén de Refused e INVSN; James Dorton de Black Crown Initiate y Replacire; Serj Tankian de System of a Down; y Alissa White-Glüz de Arch Enemy. Con todos estos nombres no hay lugar a dudas: este juego es una carta de amor al heavy metal.
Estos son los artistas del metal que participaron en la banda sonora de Metal: Hellsinger
Lo único que no nos gustó es que la banda sonora aún no está disponible de manera oficial en alguna de las plataformas de streaming de música. Esperamos que The Outsiders nos permita escuchar Metal: Hellsinger en la casa, el taller o en la oficina, pronto. Eso sí, si quieres escuchar las canciones, puedes hacerlo en la sección Códice del juego y si quieres colocar tus propias canciones, también puedes hacerlo gracias a un mod oficial de The Outsiders.
Metal: Hellsinger lo tiene todo: demonios, ejecuciones, un gameplay fresco, armas grandes y música gloriosa. Estamos seguros de que éste es uno de los FPS más destacados del 2022. Con todos estos elementos, Metal: Hellinger es un título que tiene que estar de manera OBLIGATORIA en tu colección porque sí, vale cada maldito centavo.