Más allá de incursionar por el mundo de los RPG y lejos de buscar darle la vuelta a los orígenes de la saga, Assassin’s Creed se ha mantenido como una de las sagas más importantes de los últimos años, y todo gracias al enorme legado que dejó en Xbox 360 y PS3. Es culpa de Altair, Ezio y Desmond Miles que la franquicia se haya convertido en… bueno, precisamente eso, una franquicia capaz de trascender la séptima generación, con todo y una película live action y la promesa de una reinvención completa a través de múltiples proyectos.
Para dar un paso tan importante y arriesgado, Ubisoft Bordeaux encabeza un proyecto con miras de algo clásico, dejando atrás los masivos mundos de Odyssey o Valhalla, y apostando por el parkour y sigilo como piezas clave para una experiencia más inmersiva y emocionante. Assassin’s Creed Mirage es el punto de partida para la nueva etapa que busca enfrentar el credo; ya hemos tenido la oportunidad de sumergirnos en su propuesta para comprobar que tan cerca estamos de los mejores momentos de la franquicia o si hace falta un poco más de descanso para los asesinos.
Assassin’s Creed y los cuarenta ladrones
Basim se presenta como todo un soñador, pero las circunstancias lo obligan a transformar su vida
Dejando en claro el compromiso de volver a los orígenes de la saga, Mirage nos lleva de regreso al Medio Oriente, específicamente a la ciudad de Bagdad. Este movimiento no solo busca rendir homenaje a los parajes que vimos con Altair en 2007, sino que se trata de un lugar perfecto para volver a sacar provecho de los tres pilares de la saga: sigilo, parkour y los asesinatos. De entrada, la ciudad que encontramos está llena de vida, con gente caminando de un lado a otro, varias conversaciones ocurriendo al mismo tiempo y un montón de edificios que se pueden escalar para tener una mejor perspectiva del terreno.
Sin embargo, nada de lo anterior estaría completo sin un personaje que nos permita conectar con la ciudad y sus personajes. Y es ahí donde entra Basim, un astuto pero impulsivo ladrón que está en busca de una vida mejor, pero que no ha podido escapar de las calles. Y sí, si ya jugaste Assassin’s Creed Valhalla puede que este personaje te suene familiar… con ideales y motivaciones completamente diferentes. Pero no vamos a entrar en terreno de spoilers y tampoco deberías preocuparte mucho, pues lo que busca Mirage es justamente lo que estás pensando: presentar la transformación de este… peculiar antagonista.
Cuando conocemos a Basim en Mirage nos encontramos ante un joven ambicioso y leal, con la fuerza necesaria para lograr sus objetivos y un enorme apego por las personas que lo rodean. Con un poco de las bases de Ezio Auditore, Basim se presenta como todo un soñador, pero las circunstancias lo obligan a transformar su vida, cayendo así en la senda de los Ocultos. A pesar de que vimos apenas unas cuantas escenas de la vida de Basim y sus primeros pasos como asesino, queda claro que la narrativa apuesta por un nivel de compromiso similar al que tuvimos con Assassin’s Creed II. Y claro, teniendo en cuenta lo que sabemos gracias a Valhalla, podemos especular que este viaje tendrá una trama más compleja de lo que podemos imaginar… con sus buenos giros argumentales.
¡Parkour! ¡Parkour! ¡Parkour!
Antes de la gran revelación de Assassin’s Creed Mirage, los rumores sobre un remake del primer juego de la serie estaban por todos lados, y con justa razón. Regresar al Medio Oriente implica no solo un homenaje visual a la aventura de Altair, sino también un regreso al gameplay clásico y las mecánicas que convirtieron a Assassin’s Creed en una de las franquicias más rentables de toda la industria.
Es así como Mirage se siente como un Assassin’s Creed de Xbox 360, pero con todas las mejoras visuales y técnicas que podemos encontrar en la actual generación. De entrada, Ubisoft Bordeaux ha dejado atrás las conversaciones con tomas de decisiones infinitas, por lo que tenemos un juego más lineal en cuanto a la narrativa… pero con conversaciones que igual parecen eternas. Sea como sea, es más fácil dar el salto a la acción, con todo y los clásicos tutoriales que nos recuerdan todo lo que ya hicimos en los últimos juegos.
Una vez que tomamos el control de Basim nos encontramos con ideas familiares: hay un objetivo dentro de una fortaleza, por ejemplo, y debemos llegar a él sorteando a los guardias sin llamar la atención, aprovechando la hierba alta o siguiendo el patrón de sus movimientos para ocultarnos detrás de una caja. Con un objetivo marcado, tenemos la libertad de escalar un edificio o atacar directamente a los guardias, por lo que nuestras acciones determinan qué tan fácil o difícil es pasar una misión. Si tenemos paciencia podemos terminar sin ser detectados… pero si optas por el camino de la violencia, es probable que solo te compliques más y más las cosas. Nada fuera de lo común, pero funciona.
Mirage nos dio una experiencia menos scripteada que cuando controlamos a Altair y Ezio, con una sensación de libertad bien aterrizada
Durante la búsqueda de cierto objeto, pasamos de ser perseguidos por los guardias de un edificio a correr y correr por toda la ciudad sin encontrar una zona libre de enemigos. Cuando al fin había un poco de paz, nos dimos cuenta que estábamos MUY LEJOS de nuestro objetivo, por lo que fue más conveniente restablecer un punto de control que regresar al lugar indicado con un nivel de búsqueda muy alto. Al menos en un inicio, el sigilo será clave para avanzar por la historia, aprovechando las armas secundarias para generar una distracción y avanzando poco a poco por el mapa, ya sea por encima de los techos de las casas o a través de la multitud.
Si lo que quieres es conseguir una mejor visión del escenario, Mirage nos da la oportunidad de usar la vista de águila de forma literal, con un pequeño y alado amigo que surcará los cielos en busca de todos los vigilantes, lo que, supuestamente, nos dará una mejor forma de enfrentar a los enemigos. Y decimos supuestamente, por que dependerá del jugador si elige la violencia o el sigilo. ¿Ayuda tener un águila en los cielos? Sí, sobre todo cuando las fortalezas ocupan espacios considerables, pero ojo, porque el reconocimiento de enemigos no es automático, y si no mapeas bien la zona, podrías encontrarte con una sorpresa cuando tomes el control de Basim.
Nuestra única queja es que el movimiento del ave era un poco torpe, quizá por la falta de práctica, pero daba la sensación de no moverse con la sutileza necesaria para analizar todo el terreno. Por otro lado, debes tener cuidado con sus movimientos, pues el ave es reconocida por el enemigo y en segundos pasas de un vuelo de reconocimiento a una lluvia de flechas.
En fin. Con el reconocimiento hecho, toca el turno de elegir el camino que más te convenga para superar la misión. Al menos durante nuestra prueba, la zona que nos tocó invadir era considerablemente grande y contaba con mucha vigilancia, por lo que, así como las opciones, también los enemigos estaban por todos lados. Por suerte, en ocasiones basta con correr a toda velocidad, eliminar a los enemigos correctos y tienes el camino libre. En otros momentos solo hay que poner atención al escenario, pues a pesar de tener a varios vigilantes cerca, puede que un pequeño agujero o una distracción sea lo único que necesites.
A diferencia de los juegos clásicos, Mirage nos dio una experiencia menos scripteada que cuando controlamos a Altair y Ezio, con una sensación de libertad bien aterrizada y detalles interesantes para las misiones. Eso sí, nos faltó un poco de acción con la cuchilla oculta, pues cuando teníamos la oportunidad perfecta… la nueva mecánica que automatiza los asesinatos apareció y nos robó ese golpe letal. Claro que esto no pasará siempre, pero, al menos durante la demo, nos quedamos con ganas de ser nosotros los que pudiéramos presionar el botón correcto en el momento justo para culminar la misión.
Y hablando de las armas, con Basim también tuvimos un pequeño vistazo al sable clásico del Medio Oriente que podremos llevar en nuestra cruzada. Un arma pesada y no tan sencilla de controlar, pero que da un toque más sanguinario a nuestro protagonista. Teniendo en cuenta la base del sigilo, es probable que usemos esta arma en ocasiones muy especiales, pues sus movimientos tampoco benefician mucho del combate cuando estamos rodeados. Lo que sí será indispensable es controlar el sistema de defensa para contraatacar y esquivar embates enemigos… sobre todo si optas por un camino de violencia y dejas fuera la paciencia del sigilo.
Y así como las cosas buenas regresan, también algunos problemas. Pero antes de las quejas, debemos aclarar que jugamos una versión de prueba a través de la nube, por lo que la conexión a Internet pudo haber ocasionado algunos detalles. Ahora sí, igual que en los viejos Assassin’s Creed, en ocasiones un salto que parece imposible de fallar no sale bien porque el personaje no cae en la marca correcta para el parkour o si le picas una de más al botón de salto puede que termines en el suelo y no en la azotea del edificio contigúo. Creemos que estos errores fueron un poco culpa del lag… pero rápidamente nos remitieron a viejas y tristes anécdotas en Florencia.
Bagdad en su época dorada
Para concluir con este primer acercamiento a Mirage, vale la pena destacar el increíble trabajo alrededor de la ambientación del juego. Caminar por la ciudad de Bagdad es todo un espectáculo, con comerciantes, soldados y todo tipo de personas paseando por las calles. Como si fuéramos turistas, quedamos encantados con la arquitectura de los edificios y los hermosos detalles artísticos en las telas, comercios y la ropa de los habitantes. Ubisoft Bordeaux tiene un hermoso retrato de la época dorada de Bagdad, interactivo a niveles minuciosos y con una historia que quiere mantenerse a la altura de la saga. Nada que ver con los aburridos viajes que tuvimos que enfrentar con Altair hace más de 15 años.
Assassin's Creed Mirage nos ilusiona con sus homenajes a la vieja escuela
Por si lo anterior fuera poco, durante nuestra sesión se nos recordó que el juego estará doblado y adaptado al árabe, por lo que la inmersión recibirá un punto extra. Pero tranquilo, pues también podrás jugar en español europeo y con subtítulos en español latino, pero sea cual sea la combinación que elijas, estamos seguros que encontrarás un trabajo digno de la saga.
Assassin’s Creed Mirage será la punta de lanza para toda una nueva etapa en la saga. Después de Bagdad los jugadores tendrán la oportunidad de controlar a un asesino en Japón y hasta disfrutar de un juego completo en móviles. Pero si Basim no consigue mantener la magia, todos los demás proyectos podrían verse en problemas. Tras un breve acercamiento, Mirage nos ilusiona con sus homenajes a la vieja escuela, al mismo tiempo que invita a una nueva generación de jugadores a conocer las bases más antiguas del credo.
Estamos genuinamente emocionados, pero no podremos cantar victoria hasta el próximo 5 de octubre, cuando Assassin’s Creed Mirage esté disponible en Xbox One, Xbox Series X/S, PS4, PS5 y PC.