Muchos lo han olvidado por culpa de The Last of Us, pero es una obra maestra de la ciencia ficción de la década pasada

Para muchos jugadores no existe un mejor año en la industria de los videojuegos que 2013, pues fue un año inolvidable para las consolas de la época, con juegos que transformaron para siempre a la industria: GTA V, The Last of Us y Bioshock Infinite. Sin embargo, algunos jugadores pasan por alto al mítico juego de Irrational Games y, sin lugar a dudas, la cultura pop, recuerda con más cariño e importancia al título de Naughty Dog.

Bioshock Infinite una obra maestra

Irrational Games lanzó el primer Bioshock como una exclusiva temporal de Xbox 360 en 2007, un año igualmente legendario, enfrentando una épica batalla por el GOTY contra Mass Effect, Halo 3 y Super Mario Galaxy. Si bien tuvimos una secuela en 2009, la esencia del juego original no logró encontrar su camino sino hasta 2013, cuando el mismo creador de la serie, Ken Levine, llevó -literalmente, al máximo a su equipo para el lanzamiento de Bioshock Infinite.

Viajes por el multiverso, cuentos de hadas, música de los ochenta y una atmósfera de supremacismo blanco, fueron algunos de los elementos más destacados de está épica obra maestra de la ciencia ficción. Una suerte de secuela del juego original, pero que, afortunadamente, se puede disfrutar como una pieza individual. Extrañamente, esta variante de "rescatar a la princesa", tuvo poco tiempo de gloria, pues meses después un igualmente sorprendente The Last of Us se robó la atención de las masas.

De qué trata Bioshock Infinite

Booker De Witt es un investigador privado que ha sido contratado para recuperar a una joven resguardada en la increíble ciudad de Columbia. Este extraño lugar consiguió separarse de Estados Unidos de forma extraordinaria, pues se trata de una ciudad oculta en las nubes, libre de las consecuencias de la Guerra Civil, y con una obstinada forma de llevar su día a día.

En la torre más alta de Columbia, Elizabeth, la joven que debemos "rescatar", aguarda con miedo el salir al exterior, pero también guarda un extraño secreto. Sin embargo, antes de siquiera encontrar el camino correcto a la chica, Booker descubre que la ciudad lo está esperando, pero no como visitante o delincuente, sino como el inicio de una desgracia eterna.

Un juego en donde comienzas con un bautizo y terminas quebrantando la continuidad espacio tiempo, podría ser una breve forma de describir el enorme viaje de Bioshock Infinite. Pero apenas estaríamos tocando la superficie de todo el juego, mismo que merece entrar en una lista muy selecta de los juegos que, de verdad, debes jugar antes de morir. Más de 10 años después de su lanzamiento, el juego de Irrational Games sigue vigente, a nivel técnico y narrativo, pero, sobre todo, como una pieza fundamental de la séptima generación de consolas.

¿The Last of Us o Bioshock Infinite?

Tanto Irrational Games como Naughty Dog entregaron juegos que, extrañamente, se parecen más de lo que podríamos imaginar: dos historias de redención marcadas por la inocencia de una niña que está descubriendo el mundo real. Claro, uno es en primera persona, el otro tiene zombis y a nivel visual no podrían ser más diferentes... pero se sienten casi idénticos. Dos juegos enormes, el pináculo de un cambio generacional; uno que evidenciaba que los niños de los noventa se estaban convirtiendo en hombres y mujeres.

¿Por qué el mundo prefirió The Last of Us? Suponemos que por su aspecto realista y la estrecha relación con los zombis... además de la enorme campaña publicitaria de PlayStation. Diez años después, el juego de Naughty Dog tiene una secuela, dos remasterizaciones y una serie nominada al Emmy... mientras que Bioshock Infinite fue lo último que supimos de Irrational Games. Una cuestión de suerte.

Bioshock Infinite no está en Game Pass o PlayStation Plus, pero su versión remasterizada la puedes encontrar en Xbox One, Xbox Series, PS4, PS5 y hasta Nintendo Switch. Mientras que en PC el juego está disponible en Steam y seguramente encontrarás una versión original de Xbox 360 y PS3. Sin importar la consola, te recomendamos darle una oportunidad a Bioshock Infinite, pues se trata de un juego que vale, muchísimo, la pena.