Con casi 20 años de historia, Yakuza es una de las propiedades intelectuales más importantes de Sega. Aunque su popularidad en Occidente es moderada si la comparamos con los éxitos que ha tenido su país de origen, más de 20 millones de unidades vendidas alrededor del mundo demuestran que hay un creciente interés por la franquicia desarrollada por Ryu Ga Gotoku Studio.
2020 fue un año crucial para Yakuza en Occidente luego del lanzamiento de Yakuza Like A Dragon, juego con el que Sega no solo renombró la serie en la región–aprovechando el cambio de protagonista–, sino que su lanzamiento en Xbox Game Pass impulsó el interés por un producto que experimentó con un género desconocido para la franquicia: el RPG por turnos
Mientras nos preparamos para recibir Infinite Wealth a principios de 2024 como el próximo gran capítulo de Yakuza, tenemos en nuestras manos Like a Dragon Gaiden: The Man Who Erased his Name, un nuevo juego que retoma la acción de los Yakuza del pasado y nos vuelve a poner en los zapatos del longevo y legendario protagonista: Kazuma Kiryu. ¿Qué propone este juego? ¿Vale la pena? Aquí te lo decimos.
El prólogo de Infinite Wealth, con una historia brutal
Like a Dragon Gaiden sirve como un puente argumental entre Yakuza 6: The Song of Life y Like a Dragon: Infinite Wealth, que vendría siendo Yakuza 8. En Infinite Wealth tendremos una aventura en Hawái que reúne en un solo equipo a Kazuga Ichiban, el nuevo protagonista, con Kazuma Kiryu, el personaje principal de los primeros seis juegos numerados de la serie.
¿Qué estaba pasando con Kazuma Kiryu mientras sucedían los eventos de Yakuza Like Dragon? Es esta la pregunta que responde Like A Dragon Gaiden, y para ello se deja a un lado el RPG por turnos de 2020, en favor de un título de acción que nos recuerda la jugabilidad de los primeros juegos de la saga.
No te vamos a adelantar mucho de la historia, pero debes saber que, luego de haber renunciado a todo, incluyendo su propia vida e identidad para proteger a quienes ama, el legendario yakuza Kazuma Kiryu, toma una nueva identidad como Joryu. Nuestro protagonista ahora es un agente encubierto de la facción Daidoji en Yokohama, y su aventura terminará por llevarlo de regreso a Sotenbori, Osaka, donde jugará un importante papel en la reorganización de los Yakuza de la que fuimos testigos en Yakuza: Like A Dragon. Una primera sección del juego te dejará explorar un poco del mapa en Yokohama, pero no pasará mucho para que el juego te lleve directo a Osaka, donde pasarás la mayor parte del tiempo, y será ahí donde el juego alcanza su clímax tanto narrativo como de gameplay.
En palabras de sus desarrolladores, esta historia pudo haber sido un pequeño interludio de media hora que contara la historia de Kiryu antes de su gran regreso protagónico en Infinite Wealth, pero al final del día se convirtió en una historia que funciona por sí misma. Los veteranos de la serie encontrarán abundantes guiños a toda la saga, pero incluso si es tu primer título de la franquicia, puedes disfrutar la aventura de un legendario yakuza que ahora se mueve entre las sombras como agente encubierto.
Además del regreso del legendario Dragón de Dojima tenemos excelentes personajes, muy bien desarrollados. La narrativa te mantendrá al filo del asiento con giros y sorpresas argumentales en un drama al que no le falta el peligro constante y las traiciones entre criminales. Prepárate para un juego de por lo menos 20 horas en el que, como es tradición en la saga, no faltarán escenas cinemáticas de duración considerable y largas secuencias de diálogos.
¿Qué estaba pasando con Kazuma Kiryu mientras vivimos las aventuras de Kazuga Ichiban en Yakuza: Like a Dragon? Este juego nos ofrece la respuesta.
Vuelve Kazuma Kiryu, ahora como agente secreto
Del lado de la jugabilidad, Like a Dragon Gaiden es un brawler o beat’em up tridimensional con mecánicas muy tradicionales que nos recuerdan a los juegos de acción en 3D que dieron origen a esta franquicia. Los controles son sencillos: entre los botones principales del mando encontramos uno para ejecutar un ataque ligero y otro para los ataques fuertes; si los pulsas en sucesión lograrás hacer combos. En los bumpers hay un botón para mantener la postura de combate y otro para poner la defensa. No hay una acción para fijar la cámara como tal y esto se puede sentir un poco conflictivo en los primeros minutos, pero conforme pase el tiempo te acostumbrarás a la manera en la que, adoptando la postura de combate, se cumple con una función similar para no perder de vista tus objetivos.
Otra tradición de la serie que retoma Like a Dragon Gaiden es que prácticamente todo lo que te rodea en los escenarios puede ser usado como arma en contra de tus enemigos. Parte importante del dinamismo de los combates se lo debemos a la interacción con objetos que van desde un pequeño cono de tránsito hasta una silla, una mesa o una motocicleta que puedes usar para atacar a tus rivales.
A veces Like A Dragon Gaiden puede sentirse casi como un musou al enfrentarte a una gran oleada de enemigos debiluchos contra los que vale casi cualquier combo que salga de presionar de manera ininterrumpida los botones de ataque, pero la cosa se pone buena cuando te toca pelear con los líderes de esas oleadas que llegan a ser más fuertes y estratégicos en sus ataques. Hay también muchos combates mano a mano contra enemigos poderosos en los que tienes que ser mucho más inteligente con cada movimiento. Hay que defenderse bien, esquivar y jugar mucho a los contraataques. En estos casos es como si los combates se convirtieran en un juego de peleas en 3D clásico. Se siente como si el ADN de Virtua Fighter siguiera existiendo dentro de estos juegos de Yakuza.
Entre las mecánicas que complementan esta jugabilidad tenemos el medidor de calor, que es una barra en la que vas acumulando poder para realizar ataques especiales. Esta barra se divide en segmentos y tú decides cómo gastarla. Puedes usarla de corrido para potenciar todos tus ataques por un tiempo limitado o si lo gastas en partes para efectuar movimientos especiales. Entre estos ataques poderosos encontramos contraataques cinemáticos y finishers con las armas, los cuales ueden bajar mucho de la barra de salud de tus adversarios o eliminarlos al instante.
Una novedad interesante en Like a Dragon Gaiden es que Kazuma Kiryu cuenta con dos estilos de combate entre los que puedes cambiar al instante al pulsar un botón. Por un lado tenemos el clásico estilo de pelea yakuza, mismo que nos deja ante ataques lentos y pausados, pero muy potentes. Este estilo también te permite atacar con golpes cargados que pueden romper las guardias o levantar a los enemigos para seguir impactándolos con los combos.
Por otro lado tenemos el nuevo estilo de lucha de los Daidoji, con el que Kiryu puede atacar con golpes ligeros pero sumamente ágiles. Además, este estilo permite hacer uso de las herramientas que posee Kiryu como agente secreto. Tenemos la araña, que es un lazo eléctrico que permite atraer o arrojar a los enemigos contra las paredes; la luciérnaga es un cigarrillo explosivo que funciona como una bomba portátil que puede ser útil para disuadir a grupos numerosos de rivales; las libélulas son drones que distraen y atacan a los enemigos; la víbora son unos zapatos especiales que te permiten deslizarte como si trajeras una especie de patines propulsados por cohetes para arrollar a tus rivales o escapar de las zonas de peligro en los combates. La combinación de los estilos de lucha y del uso de estas herramientas nos deja ante un sistema de combate bastante entretenido y variado, más que necesario para un juego en el que se repiten una y otra vez las peleas.
Kiryu está de regreso con nuevos juguetitos al ser agente encubierto.
Paseando por las calles de Sotenbori en Osaka
Además de seguir las misiones de historia y plantar cara a cualquier matón que se te ponga enfrente, Like A Dragon Gaiden es fiel a la estructura de los juegos de la franquicia, que buscan hacerte sentir que realmente te encuentras en el lugar que se representa con una atención minuciosa a los detalles de los entornos. Tienes muchas actividades opcionales en un mapa que es pequeño, pero muy detallado.
Las tiendas tienen mercancías de marcas que existen en la realidad y hasta cuentan con sus precios actualizados. Te encontrarás con restaurantes de cadena reales o parodias muy cercanas a lugares que existen, con menús muy variados de todo tipo de comida y bebida.
Entre las actividades de entretenimiento puedes encontrar casinos con juegos orientales y occidentales, el clásico karaoke con una buena variedad de pistas, mesas de billar con varios juegos a elegir y máquinas de dardos en las que puedes probar tu suerte en solitario o competir contra personajes del juego. No podían faltar los salones de arcade donde puedes intentar ganar premios de las máquinas de gancho o disfrutar de juegos clásicos que van desde Sonic The Fighters hasta Sega Racing Classic 2; que debuta por primera vez dentro de un juego de Yakuza. También encontrarás una consola Sega Master System cuyos juegos tienes que ir encontrando al explorar el mundo abierto. Todos estos títulos están completos y cuentan con una excelente emulación, por lo que podrías dedicar muchas horas a jugar cada uno de ellos.
Uno de los minijuegos más completos en Like a Dragon Gaiden es el de los torneos de carreras de automóviles a escala. Aquí no solo encontrarás distintas ligas, categorías y una buena variedad de circuitos, sino que podrás retar a gente que encontrarás por toda la ciudad y tratar de ganarles al modificar tu carrito de la mejor manera según lo exija cada reto.
Si quieres algo más ‘picosón’ puedes probar tu suerte en el cabaret, donde podrás gastar tus preciados yenes en un simulador de citas con las chicas de cada establecimiento, todas ellas recreadas con filmaciones de modelos en live-action. Elige bien los diálogos, gánate su confianza y podrás obtener una sorpresa al subir el nivel de afecto al máximo con cada una de ellas.
Hay mucho por hacer en Sotenbori, seguro que no te vas a aburrir.
Misiones secundarias bien elaboradas
Pero lejos de todas estas actividades de entretenimiento libre y opcional, Like A Dragon Gaiden tiene también un sistema de misiones secundarias que complementan la narrativa y te ayudan a mejorar al protagonista para afrontar los retos más complicados.
Akame es un personaje importante de la historia que conocerás tras avanzar un poco en la campaña. Esta chica es protectora de los indigentes que viven en Sotenbori, y con ellos ha formado una red de información que le permite saber absolutamente todo lo que pasa en la ciudad. Si Kiryu ayuda a Akame con varios encargos subirá el nivel de la red. También puedes ganarte la confianza y amistad de Akame, desbloqueando así secuencias especiales para conocer su historia personal. Cada misión de la red de Akame que completes te dará puntos que podrás usar tanto para mejorar las habilidades de Kiryu como para gastar en una tienda en la que se venden objetos y accesorios especiales de lo más útiles para tu aventura.
Entre las actividades relacionadas con la red de Akame hay misiones muy sencillas que son conocidas como patrullas y no son otra cosa que las clásicas ‘tareas de mandadero’ en las que hay que completar favores que van desde darle comida o medicina a quien lo solicite hasta sacar fotos de algo en específico o proteger a los inocentes de sus acosadores. Hay también otras misiones mucho más estructuradas conocidas como encargos, y aquí estamos más bien frente a pequeñas historias complementarias. Completar todas estas misiones puede ser una tarea muy repetitiva y cansada, pero nos sorprendió lo bien planteadas están muchas de ellas, con abundantes dosis de humor y hasta parodias de temas muy bien actualizados. Puedes investigar un departamento embrujado, hasta hacerle entender a un adolescente que la inteligencia artificial de “Chat DDT” no es la respuesta a sus problemas amorosos, te vas a encontrar de todo. Si eres fiel seguidor de la franquicia te encantará saber que hay increíbles referencias al pasado que te volarán la cabeza.
Aunque Like A Dragon Gaiden no es un RPG como tal, la progresión y mejora de su protagonista tiene algunos elementos semejantes a nivel estructural. Todo el dinero que ganas cumpliendo encargos o machacando adversarios equivaldría a los puntos de experiencia y lo podrás usar para comprar mejoras que complementarán el set de habilidades del protagonista. Entre más juegues, más dinero tendrás para convertir a Kiryu en un héroe de acción imparable.
Las misiones secundarias cuentan con situaciones graciosas y temas muy actualizados.
Las batallas definitivas en el coliseo del Castillo
Finalmente, hay una parte del juego que merece mención especial por su aporte a los contenidos de Like a Dragon Gaiden: el coliseo del Castillo. En un punto de la historia te vas a encontrar con un parque de diversiones para adultos conocido como El Castillo, cuya atracción central es un coliseo donde pelean los luchadores más fuertes del mundo. Parte de la historia te hará competir de manera obligatoria en peleas épicas en este espacio, pero constituye en sí mismo un modo de juego complementario que se suma a las abundantes ofertas de entretenimiento del título.
Estamos ante una arena de combate en la que podrás disputar torneos contra luchadores en varios niveles de dificultad en solitario, pero también hay combates en grupo. Si decides inscribirte en estos últimos, tendrás que gestionar un equipo de aliados que participarán a tu lado como NPCs que te darán soporte en las batallas campales del coliseo. Adversarios que has derrotado en el coliseo y personajes que has encontrado en las misiones secundarias pueden formar parte de tus equipos, pero también hay muchos otros combatientes que podrás ir reclutando para este metajuego. En todo el tiempo que jugamos de Like a Dragon Gaiden sentimos que apenas rozamos la superficie de esta modalidad que promete ser el modo perfecto para quienes quieran sacar partido máximo del sistema de combate del juego. Como sea, si por algo decides dejarlo a un lado, las épicas batallas contra jefes no te van a faltar dentro de la campaña misma.
¿Quieres todavía más? Entonces quizá te interese saber que al finalizar la campaña podrás probar una demo de Infinite Wealth que te da una probadita de la aventura que Ichiban y Kiryu tendrán en Hawai a finales de enero de 2024. Estamos ante un par de demostraciones que te ofrecerán varias horas de juego y que te dejan probar tanto el renovado sistema de combate RPG de la secuela, como una introducción a la historia del esperado Yakuza 8.
El Castillo y su coliseo son prácticamente un modo de juego por separado que te permitirá explotar al máximo el sistema de combate.
Un juego que no reinventa la serie, pero que vale la pena
Podríamos seguir analizando muchas otras cosas de Like a Dragon Gaiden, pero es momento de responder a la pregunta ¿vale la pena? Si eres un recurrente de la serie, quizá no te va a sorprender la estructura del juego con montones de cosas por hacer y descubrir que se llegan a repetir entre distintas entregas de la franquicia, pero si hace mucho que no te acercas a la misma o, incluso, si es tu primer juego de Yakuza, te podrá parecer hasta abrumador todo lo que tienes a tu disposición para pasar un buen rato.
Como a la mayoría de los juegos de la serie, Like a Dragon Gaiden tiene una estructura rígida y poco espontánea en su mapa abierto, con actividades repetitivas que pueden llegar a cansar tras una buena cantidad de horas invertidas, pero al menos esto se compensa con una muy buena historia que funciona como excelente complemento de los nuevos juegos de la línea principal de la serie y al mismo tiempo como una aventura apta para cualquier interesado en su temática.
Like a Dragon Gaiden no reinventa la serie, más bien, es un capítulo nostálgico y con un enfoque muy clásico. Lo que nos sorprende aquí es que Ryu Ga Gotoku fue capaz de desarrollar un juego muy entretenido, variado y enganchante en solo seis meses de desarrollo. Sí, es cierto que tiene abundante reciclaje de assets de los juegos principales en el mismo motor gráfico y eso ayudó mucho, pero se logró armar un juego que aporta mucho en cuestión narrativa al emocionante arco contemporáneo de la serie. Like a Dragon Gaiden es un capítulo necesario para enriquecer la historia de un personaje tan legendario como Kazuma Kiryu y se ejecutó de la mejor manera posible. Vale mucho la pena y no hace más que emocionarnos por lo que nos espera en el siguiente capítulo de la serie.
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