Otra demanda a favor de Nintendo: 15 años de batalla legal por una patente del control de Wii llegan a su fin

Después de una de las batallas legales más largas y persistentes de la industria del videojuego, Nintendo finalmente ha conseguido una victoria clave frente a Nacon por la violación de una de las patentes más emblemáticas de la era Wii. El fallo pone punto y aparte a un conflicto iniciado en 2010 tal y como reporta GamesFray y confirma, una vez más, la solidez jurídica con la que la compañía japonesa ha protegido sus ideas a lo largo de las décadas.

15 años de batalla legal

La disputa se remonta a la época de mayor auge del Wii, cuando Nintendo llevó a los tribunales alemanes a BigBen Interactive (en ese entonces nombre de Nacon) por la comercialización de controles remotos de terceros que, según la demanda, infringían directamente la patente del Wii Remote. El reclamo no era menor: la patente protegía tanto el diseño ergonómico característico del control como su tecnología interna, incluyendo el uso combinado de sensores de aceleración y una cámara destinada a interactuar con la barra de sensores del sistema.

Un año después de iniciada la demanda, el Tribunal Regional de Mannheim determinó que BigBen efectivamente había infringido la patente de Nintendo. Esa decisión fue ratificada posteriormente por el Tribunal Superior Regional de Karlsruhe en 2017, pero el caso continuó extendiéndose durante años debido a múltiples apelaciones y cuestionamientos sobre la validez de la patente. Sin embargo, tanto la Oficina Europea de Patentes como la Oficina Federal de Patentes confirmaron que la protección era legítima y plenamente vigente.

El respaldo institucional a Nintendo no se detuvo ahí. En 2017, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea se pronunció a favor de la compañía japonesa, seguido en 2018 por el Tribunal Supremo Federal de Alemania. Aun así, Nacon persistió en su estrategia legal, prolongando el proceso durante casi una década más.

Finalmente, el Tribunal Regional de Mannheim ha dictado una resolución clave: Nintendo recibirá una indemnización por daños y perjuicios superior a los 4 millones de euros, más intereses acumulados, lo que eleva la cifra total a casi 7 millones de euros. Según el equipo legal de Nintendo, una parte importante de esta suma corresponde precisamente a los intereses generados por las tácticas dilatorias de BigBen, que incluyeron el rechazo de expertos designados por el tribunal y otros retrasos procesales.

Eso sí, Nacon ha apelado nuevamente la decisión ante el Tribunal Regional Superior de Karlsruhe, lo que sugiere que el cierre definitivo todavía podría tardar. Aun así, tras 15 años de litigio, el fallo marca un momento simbólico: Nintendo ha demostrado que, incluso a largo plazo, está dispuesta a llegar hasta las últimas consecuencias para defender aquello que considera parte esencial de su legado creativo.