Nintendo recurrió a una técnica industrial para evitar que los usuarios abrieran sus consolas: aun así, lograron destaparlas

Nintendo tiene millones de fanáticos en todo el mundo. La postura family-friendly de la marca japonesa les ha ayudado a consagrar la popularidad de sus franquicias de videojuegos entre personas de todas las edades. Sin embargo, eso no quita que la compañía esté libre de polémicas. 

Una de las controversias más grandes de Nintendo es su activa campaña en contra de la piratería, lo que incluso ha ocasionado el cierre completo de proyectos de fans que no tenían intenciones de lucro. No obstante, también son celosos con su hardware, y prueba de ello es cuando utilizaron una técnica industrial para evitar que los usuarios abrieran sus consolas.

Una polémica más de Nintendo 

El que Nintendo sea tan sobreprotectora con sus productos no es algo nuevo. De hecho, desde la época de la NES han sido así, ya que la empresa usó un tornillo especial con un hueco de seis puntas con el fin de que las que personas no manipularan sus sistemas, algo que mantuvo hasta la GameCube. 

Para ello, Nintendo empleó piezas de 3.8 y 4.5 mm en sus consolas y cartuchos respectivamente. Dicho instrumento es un mecanismo de entrada y salida de seguridad altamente especializado. Con el tiempo, a este tornillo se le conoció como el "Gamebit", ya que es también es como se le llama a la única herramienta capaz de aflojarlo sin dañar a los dispositivos.

La controversia está en que los jugadores lo vieron como una decisión que obstaculizaba el mantenimiento, aún en acciones simples como limpiar la consola, obligándolos a ir a centros de reparación oficiales. Eventualmente, el Gamebit se volvió accesible y permitió que cualquiera pudiera abrir el hardware sin depender de Nintendo, reduciendo la barrera técnica que la empresa japonesa intentó imponer.

El final del Gamebit

Es importante recalcar que Nintendo no fue la única compañía del gaming en usar el Gamebit, también lo hicieron otras como Sega en los noventa. A partir de la época de la Nintendo Wii y la Nintendo DS, los creadores de Mario optaron por el Tri-Wing, otro tornillo con forma rara, esta vez con tres alas en forma de hélice, que también cumplía la misma función de impedir la intervención en las consolas.