La DS fue un éxito rotundo, pero Nintendo jamás olvidará que no pudieron competir contra el iPhone

El debate sobre cuál es la mejor portátil de Nintendo es algo de nunca acabar. Para algunos es la Game Boy Advance y los más nostálgicos dirán que es la primera Game Boy. No obstante, para la compañía japonesa, la que más ganancias le generó fue la Nintendo DS. Pero, no todo fue miel sobre hojuelas con la consola de doble pantalla. 

Es cierto que la Nintendo DS vendió más 154 millones de unidades entre todas sus versiones, y la única capaz de romper ese récord sería la primera Nintendo Switch. Como sea, no existe consola perfecta e incluso uno de los dispositivos más exitosos en la historia de los videojuegos cometió un error que la compañía de Kioto prefería olvidar.

El mayor tropiezo de la Nintendo DS

Era el año 2008 cuando Nintendo lanzó en Japón otra edición de la portátil bajo el nombre de DSi, y un año después llegaría a todo el mundo. Paralelo a ello, la empresa japonesa prometió que la Nintendo DSi tendría su propia tienda digital para descargar juegos y otras aplicaciones.

Esta plataforma digital tuvo el nombre de DSi Shop, la cual se utilizaban un tipo de moneda virtual nombrados como Nintendo Points. Sin embargo, al ser el primer intento de Nintendo por tener ese apartado digital en una de sus portátiles, la interfaz era lenta, mal organizada y poco intuitiva. 

Por si fuera poco, para ingresar a la DSi Shop se necesitaba de configuraciones específicas de acceso a Internet mediante el sistema WEP, por lo que el Wi-Fi era inestable y dificultaba la instalación de títulos. Esta tienda recibió muchas críticas, ya que no sólo fallaba en su diseño de usuario, sino también en lo operativo.

El aprendizaje para Nintendo

A lo largo de los años, la compañía de Kioto se dio cuenta de su falla con la DSi Shop. De cualquier forma, a nivel conceptual esto fue el referente para la creación de la actual eShop en ambas versiones de la Nintendo Switch. Pero, para llegar a este punto, Nintendo estuvo años en el ensayo y error, antes de ofrecer una plataforma digital estable y competitiva.