Pasó ya mucho tiempo desde que Peach fue la damisela en peligro de Super Mario Bros. Nuestra querida ‘Peaches’ es una valiente princesa que defiende al Reino Champiñón tan bien como lo hace Mario, algo que quedó completamente claro en la taquillera película que disfrutamos en 2023.
Tuvieron que pasar casi 20 años –desde Super Princess Peach que salió en 2005– para que la princesa tenga un nuevo juego dedicado a su persona. En lo que podría ser el último año de Nintendo Switch, Peach vuelve una vez más al papel protagónico.
Bienvenidos a Princess Peach Showtime! título desarrollado por el estudio japonés Good Feel, quienes también hicieron otros juegos de Nintendo como Kirby’s Epic Yarn, Yoshi’s Woolly World y, más recientemente, Yoshi’s Crafted World para Switch.
¿Qué puedes esperar de esta nueva aventura exclusiva de Nintendo? ¿Vale la pena? Dejemos que comience el show y vamos a averiguarlo.
Érase una vez en el Teatro Esplendor... obras deslumbrantes
Un día como cualquier otro la Princesa Peach asistió al Teatro Esplendor, pero la malvada Compañía Malaúva, dirigida por la villana Grape, tomó el control del recinto. Los protagonistas de las distintas obras que se ofrecen en el lugar, conocidos como Esplendis, han sido secuestrados, por lo que no le queda más a Peach que aliarse con la pequeña Lucy para tomar el papel estelar que ha quedado vacante en las representaciones. La princesa del Reino Champiñón tendrá que frustrar los malévolos planes de la Compañía Malaúva, mientras rescata a todos los Esplendis perdidos.
Iniciemos con la presentación, porque hay mucho qué decir al respecto. La recreación del ambiente teatral en Princess Peach Showtime! es espectacular y no podíamos esperar menos de Good Feel, a quienes se les da de maravilla este tipo de representaciones. Todo el tiempo queda claro que estamos ante obras de teatro, pues se alcanzan a ver los hilos de las marionetas y las bonitas capas de escenografía hacen que la pantalla de tu Switch se convierta en un bello teatro 2.5D.
El manejo de la iluminación es fenomenal, no solo por el uso de un abanico amplio de intensidades, sino porque también los focos resaltan a la protagonista o lo que necesita tu atención en el momento perfecto, tal y como pasaría en un teatro. Escenografías giratorias y trucos con video mapping simulado son ejemplos perfectos de la atención al detalle de un juego que cumple de manera excelente con la representación visual de lo que propone.
Peach es lo que quiera ser
Pero, ¿qué tipo de juego es Princess Peach Showtime!? En resumen podríamos decir que es un juego de acción, aventuras y plataformas en 2.5D, pero describirlo también como una colección de minijuegos no es muy impreciso para un título que presenta 10 estilos de juego distintos ante los papeles que toma la Princesa Peach en las obras de teatro.
En una primera etapa, los niveles nos permiten jugar un poco con Peach sin ninguna transformación. Es muy simpática la animación de verla sostener su vestido al correr, mientras aprovecha la magia de Lucy para acabar con sus adversarios al usar su listón mágico como si fuera un látigo. Una vez que ha tomado el papel protagónico de la obra, puedes esperar más variedad en el gameplay.
Jugar con Peach Espadachina no es muy distinto al de un beat’em up sencillo. Hay que recorrer niveles lineales golpeando a los enemigos con la espada y aprovechar una especie de parry para contraatacar a adversarios a los que no es posible romper la guardia de otra manera.
Los niveles de Peach Ninja están más enfocados al sigilo: hay que pasar como una sombra entre los enemigos para poder acabar con ellos y completar secciones de platforming en las que el juego se convierte en algo similar a un runner.
Peach Vaquera aprovecha su lazo para atraer y arrojar objetos u enemigos, mientras que las secciones de cabalgatas son un runner en el que hay que hacer uso de los reflejos para evitar obstáculos y acabar con los rivales.
Peach Repostera constituye algunos de los niveles más experimentales y distintos de todo el paquete, en ellos hay que completar minijuegos de precisión con todo el estilo de Mario Party. Peach Furtiva presenta algunos de los retos de platforming más interesantes de todo el juego al utilizar su gancho para columpiarse por todo el escenario.
Peach Patinadora es capaz de armar una coreografía al ponernos a coordinar los movimientos que aparecen indicados sobre el hielo. Además de que se siente muy bien deslizarse por la pista, podrás ejecutar saltos y piruetas que te ayudarán a acabar con los enemigos.
Peach Sirena utiliza su canto para controlar grupos de peces con los que puedes buscar objetos en el fondo del escenario y resolver puzzles sencillos. Peach Detective convierte el juego en algo similar a una aventura gráfica en la que hay que olvidarse por completo de la acción para investigar los escenarios en busca de pistas para resolver acertijos.
Finalmente, Peach Superheroína y Peach Kung-Fu optan por el camino del beat’em up de manera similar a los niveles de Peach Espadachina. La primera aprovecha su súper fuerza para arrojar gigantescos objetos así como su capacidad de volar en secciones específicamente diseñadas para dicha mecánica. La segunda se enfoca en los ataques precisos y los parrys para romper la guardia de los rivales en los combates. Tenemos un total de 10 transformaciones que entregan niveles lineales que se presentan cada uno como una obra de teatro. Podemos reconocer que los trajes de la protagonista tienen mucho encanto.
Pero... carece de profundidad
¿Qué tan bien funcionan estos niveles con mecánicas tan distintas? Podemos decir que nos han dejado una mezcla de sentimientos encontrados. Como ya hemos dicho desde el inicio, la presentación es muy bonita y nuestro paso frente a ellos nos deja ante una colorida aventura teatral con la que es difícil no sonreír o sentirse bien por el simple hecho de apreciar todo lo que pasa en pantalla. Juzgándolo como videojuego, estamos ante ideas muy simples y una dificultad baja, incluso para los estándares de Good Feel, que acostumbra hacer títulos para introducir a nuevos jugadores al medio.
Princess Peach Showtime! es un juego de contrastes. Está lleno de ideas, pero se quedan en un terreno superficial.
Además de lo anterior, sentimos que Princess Peach Showtime! tiene algunos problemas de ritmo, sobre todo en sus primeras horas. En el nivel introductorio a cada transformación puede haber constantes interrupciones por diálogos y, lo peor del caso, es que ni siquiera se explican con claridad algunas de las mecánicas, mismas que pueden caer en el terreno de lo ambigüo. Como sea, conforme avanzas en la campaña, el juego mejora cada vez que regresas a cada transformación, pero no podemos negar que por momentos lo llegamos a sentir un poco aburrido y esto no es algo que pase muy a menudo en los juegos de Nintendo. Son muchas las ideas que hay en Princess Peach Showtime!, pero se quedan en un terreno superficial; cuando aparentan tomar un poco más de profundidad el juego ya está llegando a su fin.
En general, Princess Peach Showtime! puede sentirse como una experiencia llena de contrastes. La acción de los niveles de Peach Kung Fu y Peach Furtiva contrastan con el ritmo lento y los casos excesivamente simples que nos encontramos con Peach Detective o la extrema sencillez de las mecánicas de sigilo de Peach Ninja. Hay niveles que tienen la chispa de la diversión característica de los juegos de Nintendo, pero otros que carecen de ella. La creatividad de la puesta en escena de Peach Patinadora y Peach Sirena, contrastan con una ejecución muy regular de los jefes de cada piso del Teatro, que están lejos de ser el pico de la diversión y reto en la campaña. La creatividad de la dirección de arte y una presentación muy bonita en cada detalle contrasta con el desempeño técnico de un juego al que se le nota una resolución baja y caídas notorias en el framerate, ¿será que en realidad estaba planeado como un juego para la hipotética Switch 2?
Una juego corto que apuesta por la rejugabilidad
La campaña puede completarse en unas 7 o 10 horas a un ritmo muy tranquilo, pero como es natural en los juegos de Good Feel, el desafío para los jugadores veteranos está en la búsqueda de los coleccionables. En cada nivel podrás encontrar Esplendoritas, que son una especie de gemas mágicas que el juego te pedirá para poder desbloquear nuevos pisos con más niveles en el Teatro. Conseguir las Esplendoritas necesarias para avanzar en el juego es súper fácil, pero es verdaderamente complicado que a la primera pasada puedas encontrar todo lo que hay oculto en cada nivel, pues no se trata únicamente de encontrar zonas secretas, sino también hay que ejecutar ciertas acciones de la manera adecuada para que aparezca el coleccionable. Quizá necesites dos o tres pasadas a cada fase para quedarte con todo, lo que podría duplicar la duración del juego.
Conseguir monedas te permitirá adquirir vestidos con distintas decoraciones para Peach, así como colores de listón para Lucy, por lo que hay razones para regresar a completar todo el guardarropa de la protagonista si eres de los que se obsesionan con el coleccionismo.
Dicho lo anterior, la rejugabilidad será clave a la hora de sacar más partido de los contenidos del juego y hay incentivos extra para la misma tras ver rodar los créditos, pero ¿es realmente divertido volver a jugar para sacar el 100%? Podría decirse que sí al redescubrir cada nivel con mejor dominio de las mecánicas, sin embargo, el juego pone algunos obstáculos que podrían generar una experiencia no tan agradable. Por ejemplo, es imposible saltarse secuencias de diálogos que podrían ya no interesarte cuando vuelves más de una vez a un nivel. Aunque existen los checkpoints en el juego, no entendemos por qué no se puede reintentar desde los mismos para buscar coleccionables situados en secciones específicas de los escenarios. Estos pequeños problemas de calidad de vida empañan un poco la naturaleza rejugable de la propuesta, y hay que sumar que cuando repites estas representaciones teatrales ya no tienen el mismo impacto de la primera vez al ser niveles completamente lineales y scriptados.
Además de los niveles principales y los jefes del Teatro Esplendor, hay un nivel extra por piso conocido como Ensayo. Estos niveles son desafíos contrarreloj que retoman algunas de las mejores mecánicas del juego y son divertidos, aunque también hay muy pocos de ellos. Nos hubiera gustado haber tenido un poco más de Ensayos en un paquete que puede sentirse ligero en cuanto a su volumen de contenidos.
¿Vale la pena Princess Peach Showtime!?
Dicho todo lo anterior es momento de responder a la pregunta, ¿vale la pena Princess Peach Showtime!? Para responder, primero es necesario que analices para quién quieres este juego, pues se siente muy enfocado a nuevos jugadores, más que al nicho de veteranos aficionados de Nintendo que, aunque están acostumbrados a juegos familiares, podrían llegar a sentir una propuesta con estas características como algo demasiado sencillo o simple.
Princess Peach Showtime! tiene su encanto, aunque es un juego muy enfocado a nuevos jugadores más que a los veteranos aficionados de Nintendo.
Desafortunadamente, este spin-off protagonizado por la Princesa Peach no es equiparable en sus mecánicas y profundidad a lo que hicieron otros spin-offs de la franquicia como Luigi’s Mansion, por poner un ejemplo, mucho menos comparable con los juegos principales de Super Mario Bros. Esto quizá pueda dejar el sentimiento de que Peach merecía algo más grande y extenso para su regreso como protagonista.
La comparación más justa sería con otros juegos de Good Feel que persiguen objetivos similares en cuanto a su audiencia objetivo. Entre estos títulos, la aventura de Peach tampoco nos parece la más brillante de todas, por lo que te recomendamos que primero pruebes Yoshi’s Crafted World –si no lo has hecho– al ser un juego más sólido y consistente.
Al final del día, pese a su simplicidad y uno que otro tropiezo técnico, Princess Peach Showtime! tiene mucho encanto y personalidad. Podemos reconocerle haberse atrevido a experimentar con su decena de transformaciones para Peach y la representación de la protagonista en cada rol es más que bienvenida dentro del universo de la franquicia. No obstante, quizá un poco más de profundidad en menos roles hubiera sido beneficioso, pues como dice el dicho: ‘el que mucho abarca, poco aprieta’. Esto parece aplicar para un juego que se acaba justo en el momento en el que parece que las cosas están tomando buen rumbo.
Te recordamos que puedes probar una demo gratuita de Princess: Peach Showtime! disponible en la Nintendo eShop, de manera que veas si lo que ofrece es para ti.
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