Antes que ser consolas de videojuegos, Switch, PS5, Xbox Series y sus predecesoras, son computadoras y, como tales, están expuestas a hackeo, una práctica amenazadora, pues no es raro usar datos bancarios para comprar diferentes cosas en los ecosistemas de dichas plataformas. Afortunadamente, compañías como Nintendo tienen un programa que recompensa a quienes encuentran vulnerabilidades para repararlas, y eso fue precisamente lo que la Gran N hizo en fechas recientes.
De acuerdo el desarrollador casero o homebrew developer de 3DS, PabloMK7, Nintendo recién parchó (de manera parcial), una vulnerabilidad hallada por hackers, primero en Mario Kart 7, y que varios desarrolladores caseros reportaron entre 2021 y 2022. El propio Pablo habría recibido mil dólares por advertir a Nintendo sobre ella.
Se trata, en palabras del propio Pablo, de "ENLBufferPWN, una vulnerabilidad severa en varios juegos first-party de para 3DS, Wii U y Switch. Permite la ejecución remota de código en la consola de la víctima con solo entablar una sesión de juego en línea con un atacante". Entre los títulos afectados estaban:
- Splatoon 3
- Mario Kart 8 Deluxe
- Mario Kart 8
- Animal Crossing: New Horizons
- ARMS
- Splatoon 2
- Super Mario Maker 2
Here is ENLBufferPwn (CVE ID pending), a severe vulnerability in many first party 3DS, Wii U and Switch games. It allows remote code execution in a victim console by just having an online game session with an attacker.
— PabloMK7 (@Pablomf6) December 24, 2022
Vulnerability report: https://t.co/QbvXKQLeDf
🧵(1/7) pic.twitter.com/4qewU5YQ9x
De acuerdo con Pablo, Nintendo tomó el reporte con seriedad y estuvo parchando la mayoría de los juegos afectados a lo largo del año que está por terminar. Esa es la buena noticia, la mala es que, de acuerdo con el hilo de Twitter que da testimonio de este asunto, Mario Kart 8 y Splatoon 1 siguen sin estar parchados, "desconocemos si otros juegos están afectados, pero es posible".
¿Cómo funcionan los hacks en la industria de los videojuegos?
Como dijimos al comienzo, los hackeos son una situación común en la industria de los videojuegos, algunos hackers crean software (exploit) que aprovecha fallos informáticos como estos, y otros se apoyan en ingeniería social para obtener datos de acceso y causar estragos.
Los modders han vuelto del hackeo de consolas una especie de reto, al punto en que se vuelve noticia cuando una nueva plataforma, como la PS5, es finalmente vulnerada por los intrusos.
Dicho eso, cuando uno piensa en hackeos en videojuegos, de inmediato viene a la mente el de la PlayStation Network en 2011, la cual fue tan grave que llegó hasta el Congreso de los Estados Unidos. Pero este año tuvimos otro, que fue la de Rockstar, y cuya consecuencia fue la filtración de toneladas de materiales inacabados de Grand Theft Auto 6, uno de los proyectos vigentes más herméticos de la industria.
Como sea, es bueno saber que al menos, en este caso, Nintendo tomó cartas en el asunto, antes de que se volviera realmente catastrófico, pero habrá que estar atentos a la situación en los juegos pendientes por recibir los parches pertinentes.