Comenzó con un simple y rudo sprite de Game Boy y ahora es uno de los Pokémon más adorables y queridos de los jugadores: así ha evolucionado Eevee

Considerado como uno de los Pokémon más adorables, e incluso, como el segundo rostro de la marca después de Pikachu, Eevee se ha ganado el corazón de cientos de miles de jugadores alrededor del mundo. Pero, ¿sabías que en un principio Eevee no era tan dulce como hoy en día lo conocemos? Así ha evolucionado el pequeño ser a lo largo de los años, transformándose en un ícono de versatilidad y, ciertamente, la ternura.

Comenzó como un modesto sprite, terminó por convertirse en la criatura más adorable

Eevee, uno de los Pokémon más emblemáticos de los más de mil que existen, nació como un modesto sprite diseñado por Motofumi Fujiwara para Pokémon Red & Green en el Game Boy. Concebido como un “lienzo en blanco” sin tipo definido, Eevee fue diseñado para no parecerse a ningún animal específico, como perros, gatos o zorros, permitiendo que evolucionara en múltiples formas elementales.

Inicialmente, más rudo y menos estilizado, su diseño fue refinado por Ken Sugimori, quien lo transformó en un personaje más tierno y amigable con su icónico arte en acuarela, y tiempo después, Atsuko Nishida añadió nuevas evoluciones como Vaporeon, Espeon y Umbreon, expandiendo su universo y aumentando su popularidad.

Dicho enfoque creativo por parte de diferentes artistas, centrado en enaltecer la adorable apariencia y la capacidad de transformación del Pokémon, hizo de Eevee un ícono de la franquicia, destacándolo no solo en los videojuegos, sino también en eventos, exposiciones artísticas y mercancías exclusivas, consolidando su estatus como uno de los Pokémon más versátiles y queridos.

Como puedes ver, en un principio no se tenía la idea de presentar a Eevee como la tierna y dulce criatura que todos conocemos: su diseño inicial era más simple y ambiguo, pensado solo como base para sus múltiples evoluciones.

Sin embargo, su transformación en un ícono adorado por los fans demuestra claramente cómo los personajes pueden evolucionar junto con las expectativas y emociones del público. En este sentido, Eevee nos enseña que, incluso lo más sencillo, puede volverse extraordinario con la suficiente creatividad y visión.