Resident Evil: Tras su primera semana de estreno, la serie de Netflix es una de las peores obras sobre videojuegos en la plataforma

Resident Evil Tras Su Primera Semana De Estreno La Serie De Netflix Es Una De Las Peores Obras Sobre Videojuegos En La Plataforma2
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Han pasado varios días desde el estreno de la serie de Resident Evil para Netflix, si bien documentamos sus puntuaciones iniciales en páginas especializadas para la crítica, queríamos darle un tiempo para ver si la situación cambiaba de aquí a su primera semana, y resulta ser que no hubo mayor cambio a final de cuentas.

A la fecha, páginas como Metacritic, ubican con un 1.5/10 la serie de Capcom en Netflix, esto desde el punto de vista del público, sin embargo, el panorama es muy similar a los primeros días, la prensa especializada calificó la obra en un promedio del 50 al 59 % de aprobación, son pocos los sitios donde se pueda ver una aprobación superior al 60 % en calificaciones especializadas.

Lo que quiere decir que, esta serie basada en el mítico juego de terror de Capcom es el peor contenido sobre videojuegos que tiene Netflix hasta el momento, a ninguna otra obra le ha ido tan mal como a Resident Evil, si tenemos en cuenta adaptaciones como las de Castlevania, The Witcher que están bastante bien ubicadas en cuanto a crítica se refiere.

No es tarea fácil adaptar una historia de algo tan complejo como un videojuego, pensábamos que la recepción de la serie al inicio de su estreno era algo exagerada, ya sabemos como son los fans con las adaptaciones que no les convence, pero en efecto no es así, al público general no le gustó ni cinco esta nueva adaptación y todo a punta a que si tendremos una segunda temporada, habrá más de lo mismo.

Si recordamos, realmente no hay una obra cinematográfica sobre Resident Evil que cumpla al cien por ciento las expectativas de los fans, y si somos sinceros, nunca existirá, dada la complejidad de su temática y el lenguaje audiovisual que maneja, que parece ser pensado estrictamente para un videojuego, la convierte en una obra demasiado difícil de adaptar, y que complacer a un público que siempre verá el lado negativo de cualquier producción relacionada a videojuegos.

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