Hollywood sabe cómo capitalizar los éxitos de taquilla como nadie más. Entonces, cuando Jurassic Park, que celebra su 30º aniversario este año, fue un gran éxito, los estudios se lanzaron de lleno al género de acción-aventura, y eso dio lugar, entre otras cosas, a Congo.
Sin embargo, a diferencia de la película de Steven Spielberg, Congo es relativamente olvidada. La historia sigue al primatólogo Elliott, quien regresa a la gorila Amy a su jungla natal, acompañado por la Dra. Karen Ross, una ex-agente de la CIA, un líder de mercenarios y un filántropo.
Por supuesto, la expedición se convierte en una pesadilla cuando los gorilas locales se vuelven peligrosamente agresivos. Vale la pena mencionar que el director Frank Marshall es principalmente un productor y cofundador de Amblin Entertainment (1980) junto con su esposa Kathleen Kennedy y Steven Spielberg. En 1992, creó The Kennedy/Marshall Company, que se utiliza principalmente para producir Congo.
Michael Crichton, autor de las novelas Jurassic Park y Congo, estuvo considerado para escribir la película desde finales de los años 70, antes de retirarse cuando se enteró de que Amy sería interpretada por un gorila falso.
Problemas en la producción
Inicialmente, Marshall intentó utilizar la tecnología digital empleada en Jurassic Park para crear a los gorilas de la película. Sin embargo, se dio cuenta de que, en ese momento, era muy complicado crear pelaje de manera creíble, por lo que optó por utilizar disfraces en su lugar.
Durante el rodaje, el escenario de la cueva de piedra roja de los gorilas, que en realidad eran de color gris claro, presentó un problema: no permitía resaltar los trajes de los animales, lo que frustró a Stan Winston, supervisor de efectos especiales y director del segundo equipo. No podía iluminarlos como le hubiera gustado para ocultar mejor el hecho de que se trataba de actores en trajes.
En Congo se pueden encontrar muchos elementos de Jurassic Park, como criaturas hostiles y amenazadoras, una doctora que al principio nadie toma en serio, la presencia de tecnología impresionante (Amy puede comunicarse con los humanos porque su lenguaje de señas se traduce oralmente a través de una máquina), e incluso se utilizan los mismos "planos de computadora" que en Jurassic Park (uno de ellos oculta un detalle interesante), que hoy en día parecen sacados de un videojuego.
También encontramos un compañero sarcástico interpretado por Grant Heslov, una escena de ataque nocturno, una secuencia bajo la lluvia, pero sin la habilidad para la dirección de Spielberg y sin la indiscutible moral de la película de 1993.
Congo: un éxito en taquilla
A pesar de su generoso presupuesto de 50 millones de dólares (solo 13 millones menos que Jurassic Park, a pesar de tener muchos menos efectos especiales digitales), Congo fue un éxito en la taquilla, recaudando 152 millones de dólares en todo el mundo. Un resultado merecido por el entretenimiento que ofrece, pero en comparación, recaudó mucho menos que la película de dinosaurios, que recaudó 978 millones de dólares.
Quizás se deba a su reparto muy característico de la década de 1990, a su falta de grandeza visual o a una amenaza menos impresionante y novedosa que los dinosaurios, pero Congo es en gran medida olvidado por el público en general en la actualidad. No obstante, sigue siendo una forma sencilla y legal de volver a verlo o descubrirlo, ya que actualmente está disponible en Prime Video.
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