Dragon Ball GT es una de las series más icónicas de los noventa. Sin embargo, tiene varios detalles que no se han revelado hasta la fecha y que deslumbran a miles de fans cada día. Ahora, conoceremos una técnica bastante simple pero efectiva que en su momento le ayudó a salvar su vida en aquel momento.
En el episodio 30 de Dragon Ball GT se nos muestra un tablero de juego a cargo de Sugoro, un ser de otro mundo cuyo objetivo era ganar más de diez mil partidas para escapar de su cadena perpetua. Por otro lado, si Sugoro llega a su objetivo, Goku moriría. Sin embargo, el juego añadió una regla particular, la cual era no poder llorar. Si alguien lloraba instantáneamente moría.
A raíz de esto, Goku luchó contra sus instintos para no llorar, pero Sugoro le puso muchas cebollas a su al rededor para lograr que llorara. Aunque ciertamente funcionó, Goku succionó sus lagrimas de vuelta por el conducto lagrimal creando una de las escenas más absurdas de la serie. Para sorpresa de muchos, esto pudo pasar en uno de los capítulos de relleno del Dragon Ball original, pero Akira Toriyama desistió de la idea.
¿Una idea aprovechable en Dragon Ball Z o algo solo para Dragon Ball GT?
Desde los primeros capítulos de Dragon Ball Z en la saga de Majin Buu, hasta la saga de cell donde Goku pasa tiempo de calidad con Gohan manteniendo su transformación en Super Saiyajin. También podemos recordar momentos como el reencuentro de Milk o las primeras experiencias de Goku consiguiendo trabajo. Hubo muchos momentos donde algo tan absurdo pudo ser aprovechado pero nunca se hizo.
Los invitamos a repasar este y muchos datos curiosos más del mundo del anime y el manga, como por ejemplo el homenaje que rindió Akira Toriyama a Eiichiro Oda, también el rediseño de la portada de Naruto tras los 20 años de estreno de la serie, y por supuesto, explicamos la relación que tenían Zabuza y Haku, los primeros villanos de Naruto.