Por segunda ocasión consecutiva, el concierto sinfónico de Dragon Ball se celebró en la Ciudad de México, en una presentación especial que tuvo lugar en el Auditorio Nacional. El evento, que forma parte de una serie de conciertos adaptados para diversas regiones del mundo, no solo cumplió con nuestras expectativas: se consolidó como uno de los momentos más significativos para los fanáticos del anime y la cultura pop en este segundo semestre de 2025.
Así se vivió en México la experiencia sinfónica de Dragon Ball
La noche del 6 de septiembre, el Auditorio Nacional se convirtió en el punto de encuentro de miles de fanáticos de Dragon Ball en México, ofreciéndonos una experiencia única en la que la música que Toei Animation compuso para los dos primeros animes de DB se interpretó en vivo con una orquesta sinfónica. ¿Su objetivo? Conmemorar la historia de Goku y sus amigos, y permitirnos revivir algunos de los momentos más icónicos de la saga.
Como parte de una serie de presentaciones originadas en Japón y adaptadas a diversos países, como Francia, Canadá y España, ahora le tocó a México ser el país seleccionado para formar parte de este evento especial.
El proyecto fue llevado a cabo por Toei Animation en colaboración con Anime Music Lab, y contó con la dirección de Rodrigo Cadet, compositor y director egresado de la Escuela Superior de Música, quien estuvo al frente de la Orquesta Sincrophonia. Además, participaron voces destacadas como las de Luis de Lille, la soprano Irma Flores, el artista Aarón Montalvo y el célebre Hironobu Kageyama, quien interpretó los emblemáticos openings y endings en Japón.
Reviviendo el Dragon World con los temas clásicos de Toei Animation
El concierto se dividió en dos partes claramente diferenciadas, con un total de 23 canciones. Ambas partes se caracterizaron por ese enfoque grandilocuente y orquestal propio de la serie, con violines, teclados, guitarras eléctricas, aunque claramente predominó la presencia de instrumentos de viento, los cuales replicaron a la perfección la majestuosidad y el poder sonoro de cada pieza.
La primera parte estuvo dedicada a los inicios de la saga, cubriendo desde los primeros episodios de Dragon Ball hasta el Torneo de las Artes Marciales, mientras que la segunda parte abarcó desde la Saga de los Saiyajin hasta la de Majin Buu.
Es difícil señalar una canción como la más destacada entre el repertorio, ya que cada pieza tiene su propia carga emocional para los seguidores de la serie. La primera parte del concierto, que abordó los primeros episodios de Dragon Ball, podría haber resultado menos conocida para una parte del público, pero incluso con estos temas, los fanáticos mostraron bastante entusiasmo.
Sin embargo, los momentos más aclamados por el público llegaron con los temas asociados a Dragon Ball Z. La Saga de Freezer fue un punto álgido, especialmente la emblemática pieza que acompaña la primera transformación de Goku en Super Saiyajin. También destacó la música de la saga de Majin Buu, particularmente Son Goku is the Strongest of All, pues mientras los acordes de esta canción llenaban el Auditorio Nacional, miles de fanáticos alzaron las manos en un acto simbólico de enviar su energía a Goku, tal como en la famosa escena de la Genkidama.
Como toque final, Aarón Montalvo interpretó Tu Corazón Encantado, el icónico tema de Dragon Ball GT: una canción que aunque forma parte de un anime que no es canónico, vaya que se ha ganado un lugar especial en los corazones de los fanáticos.
Un escenario adecuado para el brillo de Goku
Eso sí: el concierto siguió un guion cuidadosamente preparado, lo que dejó poco espacio para improvisaciones o sorpresas de último minuto. Debido a la complejidad de la orquesta y la precisión requerida, todo estaba fríamente calculado. Sin embargo, la propia magnitud del espectáculo, la emoción de los fanáticos y la importancia de los invitados hicieron que el evento fuera memorable por sí mismo.
El uso de luces fue adecuado y estuvo en sintonía con el tono grandioso del concierto, aunque no alcanzó niveles de innovación que lo hicieran destacar de forma memorable. La acústica del Auditorio Nacional, por su parte, cumplió con las expectativas: el diseño del recinto permite una excelente proyección del sonido, lo que favorece a la música sinfónica.
Sin embargo, hubo algunas ligeras inconsistencias en la calidad del sonido en zonas alejadas del escenario. En nuestra experiencia personal, en la fila J, asiento 187, el audio no llegaba con la misma claridad que en las primeras filas, lo que generó una ligera desconexión en algunos momentos de la presentación. A pesar de ello, la experiencia general fue muy positiva.
¿Valió la pena el concierto sinfónico de Dragon Ball?
Para muchos de los asistentes más veteranos, este concierto significó una oportunidad única para revivir el pasado: fue un viaje nostálgico hacia aquellos momentos en los que Dragon Ball marcó el inicio de su historia en México. Mientras que para las generaciones más jóvenes, se presentó como una manera de conectar con un presente lleno de energía y emoción.
Lo cierto es que este concierto sinfónico en México no solo celebró la música de la serie: nos recordó a todos que, más allá de las décadas y las generaciones, la obra de Akira Toriyama sigue siendo un vínculo poderoso que une a millones de personas. Dragon Ball volvió a reafirmar su lugar en el corazón de sus fanáticos, y en esa noche, todos se unieron, alzando las manos al unísono, como nunca antes.
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